Luego de la investigación, las autoridades indicaron que su esposo Jesús “N” es el principal y único sospechoso
FOTOGRAFÍA: JACOB GARCÍA
Familiares de Claudia Matilde Farrera Esponda exigen justicia para detener al culpable de su feminicidio; según los indicios, su esposo es el principal sospechoso.
Karen Joseline Aquino Farrera, sobrina de la víctima, detalló ante los medios de comunicación que la última vez que vieron a Claudia con vida fue el pasado 17 de diciembre, cuando se retiraba a casa con su esposo Jesús “N”.
En la mañana del día siguiente recibieron una llamada de un familiar de él, “diciendo que por favor fuéramos a ver a mi tía, que un día antes habían tenido discusiones o problemas, y que fuéramos a ver si estaba bien”.
Cuando sus tíos llegaron a la vivienda —ubicada en Jiquipilas— se encontraba cerrada, por lo que tuvieron que pedir permiso a la arrendadora para romper los cristales de las ventanas. “Encontraron el cuerpo de mi tía sin vida, muy golpeado, con moretones, hinchada, no sabemos qué paso”.
Karen comentó que Jesús no se hallaba en el lugar de los hechos, ni tampoco su automóvil. Entonces, después de la investigación de la Fiscalía General del Estado, “lo declararon como único y principal sospechoso”, y el 22 de diciembre se giró la orden de aprensión.
El esposo de la víctima es originario de San Luis Potosí, pero vivió muchos años en Salina Cruz, Oaxaca, y también en Puebla; en este último lugar conoció a Claudia, con quien llevaba 15 años de casados.
“Son muchos destinos donde pudo tener contacto”; por lo tanto, piden el apoyo de las autoridades y de la sociedad para encontrarlo, “en nombre de una familia que está destrozada y de las mujeres”, agregó Karen.