En un periodo de seis meses con las condiciones óptimas, se pueden tener ejemplares con un
peso de hasta 450 gramos; la mayor parte de su producción se lleva a cabo en Malpaso y Peñitas
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
En Chiapas los índices de demanda de la mojarra Tilapia se incrementaron y al mismo tiempo
catapultó al estado como uno de los principales productores de esta especie, así lo puntualizó el
director ejecutivo de la asociación civil Biodiversidad del Usumacinta, Gilberto Pozo Montuy.
La comercialización de la mojarra proyecta ser un negocio redondo y con una buena oportunidad
para generar un crecimiento importante de la entidad, dado que, se produce el 87 por ciento de
tilapia en México, que genera ganancias importantes para todas aquellas familias que se dedican a
la pesca y cría de este marisco, indicó el investigador de la facultad Maya de Estudios
Agropecuarios de la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach).
La característica principal de esta especie es la tolerancia a variaciones de salinidad y
concentraciones de oxígeno, su agresividad y la capacidad para comer a otras especies nativas,
dado que, es un ejemplar proveniente del Río Nilo de África, detalló el investigador.
También advirtió que la crianza de Tilapia debe ser en un ambiente controlado y mantener las
buenas prácticas en acuicultura ayudaría a tener mejores resultados, como el utilizar jaulas
flotantes con estanques o tinas para evitar alguna liberación accidental en otros cuerpos de agua.
En los últimos cinco años, a nivel nacional, Chiapas se distinguió por la alta producción de mojarra
y en 2019 se tiene un registro de 27 mil toneladas que generó una utilidad de más de un millón de
pesos; la mayoría del proceso de crianza fue realizado en Malpaso y Peñitas.
Asimismo, enfatizó en el control de calidad que se maneja y la temperatura idónea que se debe
proporcionar a la tilapia con la finalidad de obtener ejemplares de mayor tamaño, puesto que, en
siete meses se pueden producir peces de 400 a 450 gramos, listos para su comercialización.
Se tiene un registro en 2019 de 27 mil toneladas, que generó una utilidad de más de un millón de pesos