Granito de Arena ha recibido a niños que en su mayoría fueron violentados por familiares, por lo
tanto, requieren de apoyo económico para solventar sueldos de los terapeutas
YUSETT YAÑEZ/PORTAVOZ
Juan Esteban Gutiérrez, presidente de la fundación Granito de Arena mencionó que existe mucho
compromiso con los niños que ahí atienden, dado que durante el confinamiento aumentó la
violencia en las casas, y sobre todo la violencia sexual; refirió que durante las dos últimas semanas
de marzo llegaron a la fundación ocho niños, cifra alarmante, porque el apoyo económico es el
principal reto.
“Hace una semana llegaron a esta fundación cinco niños, la semana pasada tres niños, por lo
tanto, es el principal reto para esta fundación, la parte económica, porque hay que pagar sueldos
de psicólogos, psicólogas y psiquiatras”.
El 90 por ciento de los niños que se atienden en esta fundación son mujeres, reciben menores de
dos años, hasta los 16, el caso más reciente fue una niña de 12 años que fue secuestrada durante
cuatro años, a quien se le da un acompañamiento, no sólo a la víctima, sino a los padres y los
hermanos.
Lamentablemente existe un tabú entre los padres, que tienen mucha vergüenza de que sus hijos
hayan sido violados, la mayoría de las niñas son violentadas por familiares.
En esta fundación no sólo dan terapia psicológica, dependiendo de la situación hay infantes que
requieren de medicamentos para poder salir adelante, y el costo de los mismos requiere de
donaciones.
“Ya que hay niños que están medicados, actualmente hay 58 niños, en promedio un psicólogo
cobra mil pesos por terapia, hay niños que necesitan terapias semanales, quincenales o
mensuales, dependiendo en el caso”.
Además, la terapia que Granito de Arena da, es por medio del juego, donde utilizan muñecos
(legos), y actualmente el salón de terapia carece de estos.
“Los niños se les da terapia con muñecos, mismos que ya no hay muñecos hombres, dado que los
destruyen por obvias razones”.
Por lo anterior, Granito de Arena necesita voluntarios para poder cubrir gastos, quienes deseen
apadrinar a un niño pueden sumarse a la causa, desde acudir a la fundación para hacer galletas y
vender, o realizar donaciones.
Esta fundación trabaja de la mano con la Fiscalía, sobre todo se les da el acompañamiento jurídico.
Juan Esteban concluyó, mandando un mensaje a los padres de familia, “se debe creer a los niños
cuando denuncian que han sido violentados, nosotros como fundación, tenemos que sacar las
espinas de su corazón”.