Expandir el horizonte sonoro y crecimiento artístico de sus alumnos ha sido el objetivo de la
maestra Gloria Marroquín
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
Los primeros años de la infancia son primordiales para el desarrollo de aptitudes deportivas,
culturales y artísticas. “Niños al Piano” ha entendido bien este concepto de enseñanza-aprendizaje
con la intención de fomentar las mejores prácticas didácticas y motivar a sus alumnos a ejecutar
piezas musicales en el instrumento que deseen, al igual que entender la relación entre la música y
la naturaleza.
Dicho lo anterior, “Niños al Piano”, proyecto de educación musical formado y encabezado desde
2002 por la maestra Gloria Marroquín, tuvo la oportunidad de visitar la clínica veterinaria y
fundación Tivú A.C., el pasado sábado, esto como parte de su agenda de actividades en el
quehacer musical del ciclo escolar 2023-2024.
La intención de dicha actividad consta de mostrar a sus alumnos la relación que existe entre la
música y la naturaleza; abriendo su panorama visual y auditivo ante los diversos estímulos que los
rodean día con día. Muchos músicos a lo largo de la historia se inspiraron en los elementos que
componen un ecosistema, desde la tierra hasta el canto de las aves con la finalidad de crear
epopeyas musicales que han trascendido generaciones.
En ese sentido, muchos instrumentos musicales fueron creados y diseñados por el ser humano
para replicar el sonido o la sensación que experimentaron al entrar en contacto con la naturaleza
misma. La relación que guarda la música con el mar, el canto de los pájaros, el sonido del aire
recorriendo las hojas del bosque, el frío invierno y todo aquello que engloba una emoción en
particular puede expresarse y plasmarse en sinfonías auditivas.
“Niños al Piano” logró compartir este proceso musical a sus alumnos como un método integral de
enseñanza que consistió en desarrollar un vínculo con la fauna silvestre, donde pudieron escuchar,
observar y convivir con búhos, águilas, tucanes, cotorros, quebrantahuesos, osos hormigueros,
entre otros. Los estudiantes se percataron de la importancia de respetar y preservar la naturaleza
que los rodea.
La fundación Tivu se encuentra ubicada en la avenida golondrinas número 725 fraccionamiento
Buenos Aires, Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Ofrecen servicios veterinarios y son especialistas en la
atención en fauna silvestre y exótica. El horario de atención es de lunes a viernes de 09:00 a 14:00
horas y de 16:00 a 20:00 horas.
La doctora Elsy Cabrera es la responsable de la unidad de atención veterinaria y ha realizado una
carrera estupenda en la asistencia y rescate de diversos ejemplares animales; por ello, hizo un
atento llamado a la población en general en caso de realizar algún donativo como frutos, verduras,
material quirúrgico o de limpieza con el propósito de mantener en óptimas condiciones a las
especies que alberga el recinto.
Con este modelo de enseñanza que implementa la maestra Gloria Marroquín, motiva a los niños a
explorar una nueva faceta musical que les permita lidiar con emociones como la empatía, la
consciencia y el amor hacia a otro ser vivo, sea una planta, un río o un animal.
Los múltiples idiomas que puede adoptar la música son una muestra de su alcance y lenguaje
universal que trasciende tiempos, edad, culturas y lenguajes. “Niños al Piano” busca contagiar la
magia, pasión y sensibilidad de escuchar al mundo a cada uno de sus estudiantes y llevarlos por un
camino de autodescubrimiento sonoro.
Asimismo, queda claro que la naturaleza funge como un factor importante en la creación y el
desarrollo musical de una persona, es un elemento que ha otorgado inspiración a grandes
interpretes de la música clásica y la actual, por lo tanto, fomentar la relación entre el ser humano y
su entorno impulsa a crear intérpretes que transportan al espectador a estos ambientes naturales
con el sonido de unos acordes.