Esta carretera vital se encuentra en estado crítico, sumando manifestaciones y quejas continuas
de la comunidad
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
En la primera parte del año las dificultades persisten en la carretera que conecta Tapachula con
Nueva Alemania, conocida como la Ruta del Café. Esta vía, es vital para la zona turística, la cual
enfrenta condiciones deplorables con grandes hoyos que hacen que el tránsito de vehículos sea un
peligro.
Tanto el transporte público como el privado se ven obligados a transitar por esta vía deteriorada,
debido a que no hay una alternativa en mejores condiciones. La situación genera no solo
incomodidad, sino también riesgos para los conductores y pasajeros. El proyecto de renovación de
dicha vía carretera quedó en el olvido y las autoridades de infraestructura chiapaneca siguen
omisas para resolver una de las necesidades de comunicación más importantes del estado.
La Ruta del Café, lejos de ser un atractivo turístico, se ha convertido en un dolor de cabeza para los
habitantes de la región. La falta de una vía de comunicación en condiciones óptimas afecta de
manera directa las actividades económicas de la comunidad. A lo largo de los años, la carretera ha
sido motivo de inconformidad y protestas, pero las manifestaciones no han logrado solucionar el
problema.
Los residentes, frustrados por la falta de mejoras, se ven obligados a padecer los constantes
obstáculos y peligros de la carretera. Los prestadores de servicios de la Ruta del Café, quienes
dependen de una infraestructura adecuada para brindar un servicio eficiente, también enfrentan
desafíos que impactan de manera negativa sus negocios.
La Ruta del Café, que debería ser un símbolo de prosperidad y conexión, se ha convertido en un
reflejo de la negligencia gubernamental y la falta de atención a las necesidades de la comunidad.
Urge una acción inmediata para rehabilitar esta vía carretera, garantizar la seguridad y el bienestar
de quienes dependen de ella.