Diversas organizaciones locales y nacionales, se unieron para dar voz a cifras alarmantes que
reflejan una desgarradora crisis
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
En los últimos años, Chiapas ha destacado por la ola de violencia que aqueja a los sectores más
vulnerables. Dentro de ellos se encuentran los Niños, Niñas y Adolescentes (NNA), un segmento
poblacional que debería estar centrado en su desarrollo educativo, con la finalidad de acceder a
mejores condiciones de vida, indicaron diversas organizaciones defensoras de los derechos de la
infancia en San Cristóbal de Las Casas.
Las estadísticas desveladas arrojan una verdad cruda y desafiante: entre los más de dos millones
de niños en Chiapas, cerca de 300 mil sufren diversas formas de violencia, la cual se extiende por
calles, escuelas, lugares de trabajo y, hasta sus propios hogares. Maltrato, reclutamiento por
grupos criminales, desapariciones y abusos son manifestaciones perturbadoras de esta dura
realidad.
La directora de la organización Melel Xojobal, Jenifer Hazza Rodríguez, compartió una visión que
va más allá de números. Desde 1997, niños y adolescentes en San Cristóbal de Las Casas han sido
testigos de maltratos persistentes, documentados a través de datos oficiales, testimonios
parentales y vivencias directas de los menores afectados.
Hazza no solo presentó estadísticas, sino que hizo un llamado enérgico a las autoridades para
erradicar dicha problemática y efectuar medidas que protejan a las infancias en la entidad. Su
mensaje resonó más allá de las instituciones gubernamentales e instó a la sociedad a reflexionar
sobre las devastadoras consecuencias de la violencia.
Es fundamental la colaboración entre organizaciones civiles y autoridades estatales, dado a que en
conjunto ofrecerán mejores mecanismos de protección a los derechos humanos de los NNA en
Chiapas. El objetivo a perseguir es claro: ofrecer un entorno seguro y libre de violencia para las
nuevas generaciones del estado.