Armas de fuego son la principal causa en fallecimientos e infantes masculinos, representan el
sector más vulnerable
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
La alarmante realidad que enfrenta Chiapas se refleja en el incremento desgarrador del 44 por
ciento en homicidios dolosos de niños entre 2022 y 2023, según reportes de la asociación civil
Melel Xojobal y la Red por los Derechos de las Infancias en México y Adolescentes en Chiapas. Este
preocupante fenómeno no solo exige una respuesta inmediata, sino que pone de manifiesto la
urgencia de abordar la violencia infantil en la región.
En 2022, mil 450 niños y niñas fueron víctimas de homicidio, estas cifras subrayan la vulnerabilidad
que experimenta dicho sector en la entidad. El caso de Kimberly Isabella, encontrada sin vida en
2015 en la Estancia Infantil “Pasitos de Colores”, simboliza la tragedia que muchas familias
enfrentan.
El año 2022 trajo una leve esperanza con la reaprehensión de una presunta responsable, pero la
magnitud de los asesinatos, con mil 110 niños y 340 niñas afectados, revela una crisis que no
puede pasarse por alto.
Carlitos, víctima en 2021 en Chiapa de Corzo, evidencia la complejidad de estas tragedias, donde la
adopción ilegal y la negación de convivencias son parte de un sombrío escenario que perpetúa el
sufrimiento.
La historia de Damián, entregado sin vida en 2023 en la Guardería Piguin and Babe, añade una
capa adicional de urgencia a la situación. Mientras tanto, el Observatorio Ciudadano destaca un
cambio preocupante: en 2023, la modalidad de los homicidios infantiles se ha inclinado hacia el
uso de armas de fuego.
En este contexto, la desigualdad de género se manifiesta con crudeza: 26 niñas han sido víctimas
de feminicidio entre 2018 y 2023, mientras que el 82 por ciento de los asesinatos infantiles se han
dirigido contra niños.
Ante estos escalofriantes datos, es imperativo que las autoridades, la sociedad civil y la comunidad
internacional trabajen de la mano para implementar medidas preventivas, fortalecer el sistema
legal y garantizar la seguridad de la infancia chiapaneca. El aumento del 44 por ciento en
homicidios dolosos es un grito de alerta que no podemos ignorar.