Los delitos digitales en Chiapas, como el ciberacoso y grooming, preocupan a autoridades y padres de familia
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
La situación en Chiapas respecto a la exposición de los niños y adolescentes a los riesgos en línea es alarmante, esto es un reflejo de una realidad que se replica a nivel nacional. A pesar de la creciente penetración de Internet en la entidad, con un 38.4 por ciento de hogares conectados, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), se evidencia una falta de medidas efectivas para proteger a la juventud de los peligros digitales.
La comisaria de prevención y Policía Criminal de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) en Chiapas, Gladys Elena Bonifaz Cordero, destacó la preocupante tendencia de los jóvenes a ser influenciados por las redes sociales, donde se promueven comportamientos riesgosos y poco saludables. Este fenómeno impacta en la construcción de proyectos a largo plazo, lo que deja a los jóvenes vulnerables a la manipulación y explotación en línea.
Los datos proporcionados por la Policía Cibernética de Chiapas revelaron una amplia gama de delitos a los que los menores están expuestos, desde el ciberacoso hasta la sextorsión. Estas prácticas han ido en aumento, como lo indica el incremento de los casos de robo de identidad otráfico de personas reportados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en todo el país.
La pandemia logró agravar estos riesgos, con un aumento significativo de estos delitos, según señaló la Fiscalía General de la República (FGR). La falta de supervisión y educación digital adecuada deja a los niños y adolescentes vulnerables a ser víctimas de explotación y abuso en línea.
Ante esta situación, es urgente que las autoridades en Chiapas implementen medidas efectivas para proteger a la juventud en línea, incluyendo campañas de concientización, programas de educación digital y colaboración con organizaciones civiles y educativas para abordar estos desafíos de manera integral. La protección de los derechos de los niños y adolescentes en el entorno digital debe ser una prioridad en la agenda de políticas públicas de Chiapas.