Activistas y familiares esperan que el proceso judicial marque un precedente en la protección de
defensores
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
En un momento crucial para la búsqueda de justicia, el caso del activista Sinar Corzo Esquinca
vuelve a ponerse en el centro de atención en Chiapas. A cinco años de su asesinato en Arriaga, el
atentado contra de este luchador social, conocido por su labor en el Comité de Derechos Humanos
“El Coloso de Piedra”, tendrá acceso a un juicio oral.
Desde el fatídico evento de enero de 2019, las autoridades locales y federales se comprometieron
a llevar a cabo una investigación exhaustiva para esclarecer los hechos y llevar ante la justicia a los
responsables. Después de múltiples recursos legales interpuestos por los acusados, finalmente se
ha fijado la fecha para el inicio del juicio, programado para el próximo martes 18 de junio en el
Centro de Readaptación Social de Tonalá.
El proceso judicial no solo representa un paso hacia la justicia para la familia y amigos de Sinar
Corzo, sino también una oportunidad para destacar la vulnerabilidad de los defensores de
derechos humanos en México. El asesinato de Corzo, que provocó indignación y protestas a nivel
nacional, subraya la necesidad de proteger a quienes arriesgan sus vidas en la defensa de los
derechos fundamentales.
Además de exigir justicia, los allegados de Corzo han llamado a la comunidad nacional e
internacional a seguir de cerca el desarrollo del juicio. Consideran que este caso no solo debe
castigar a los responsables materiales, sino también servir como un mensaje contundente sobre la
importancia de proteger la labor de los activistas en Chiapas y el resto del país.
La historia de Sinar Corzo no es solo un recordatorio de los riesgos que enfrentan los activistas en
México, sino también un llamado a la acción para fortalecer los mecanismos de protección y
garantizar que crímenes como el suyo no queden impunes. El juicio que comienza esta semana
marca un hito en la lucha por la justicia y la protección de los derechos humanos en Chiapas.
