Reveló un alarmante aumento de muertes y ataques directos contra NNA, instando a una respuesta urgente
ARGENIS ESQUIPULAS/PORTAVOZ
En un contundente llamado a la acción, La Red por los Derechos de la Infancia y Adolescencia (REDIAS) en Chiapas exigió este viernes al Gobierno de México reconocer la situación de violencia que azota a la entidad y aplicar medidas de protección integral para más de 200 mil menores de edad. En una conferencia de prensa celebrada en San Cristóbal de Las Casas, REDIAS reveló un alarmante aumento de muertes y ataques directos contra niñas, niños y adolescentes (NNA), instando a una respuesta urgente ante la gravedad del escenario.
La vocera de REDIAS, Violeta Galicia, subrayó la extrema violencia que se ha desatado en el último mes, precisando que entre el 13 de mayo y el 13 de junio de 2024 se han registrado más de 13 muertes y siete heridos entre menores de edad en las comunidades indígenas del estado. “Hablamos de un mes sin precedentes. Nos referimos, por un lado, a la cantidad de asesinatos y la brutalidad con la cual se están ejecutando. Es por eso que estamos aquí convocando de carácter urgente por la gravedad del asunto”, expresó Galicia.
Las organizaciones integrantes de Redias señalaron que los menores han sido víctimas de los conflictos entre grupos políticos y armados, los cuales han escalado en el estado. Estos enfrentamientos suponen un riesgo mortal para los niños y adolescentes, quienes se encuentran en medio de un ambiente de creciente violencia y criminalidad.
Óscar González, activista de Melel Xojobal, detalló que la situación es extremadamente crítica, con menores enfrentando desapariciones, homicidios, reclutamiento forzado por el crimen organizado y desplazamientos. “Esta conferencia es de carácter urgente. Hoy niñas, niños y adolescentes están enfrentando desapariciones, están siendo parte de homicidios, son reclutados por el crimen, son desplazados”, enfatizó González.
Los expertos destacaron que los menores de edad sufren los daños colaterales desde una edad muy temprana, afectando su salud física y psicológica, y perjudicando su educación, especialmente a nivel primaria. La violencia ha generado un entorno de terror y desolación que interrumpe el desarrollo normal de los niños y adolescentes en Chiapas.
El caso más reciente y conmovedor es el asesinato de una familia tzotzil en el municipio de Pantelhó. En la madrugada de este viernes, tres menores y dos adultos fueron asesinados, y tres niñas resultaron heridas. Este hecho ilustra la brutalidad de los ataques y el nivel de vulnerabilidad de las comunidades indígenas.
REDIAS informó que las agresiones se están concentrando particularmente en 30 municipios, incluidos Acapetahua, Berriozábal, Chicomuselo, La Concordia, Oxchuc, Pantelhó, Rincón Chamula, San Fernando, Simojovel, San Cristóbal de Las Casas y Tila. Estos municipios se han convertido en puntos críticos de violencia, donde los menores de edad están expuestos a un constante peligro.
Durante la semana del 13 al 19 de mayo, REDIAS documentó cuatro asesinatos de adolescentes en diferentes municipios de Chiapas. El 13 de mayo, un ataque armado en la comunidad de Nuevo Morelia, Chicomuselo, resultó en la muerte de una mujer adolescente de 17 años y un hombre adolescente de 15 años.
Tres días después, el 16 de mayo, otro ataque armado dirigido a la candidata a la Presidencia municipal de La Concordia terminó con la vida de dos adolescentes de 15 y 17 años, junto con seis personas más. Finalmente, el 19 de mayo, en un atentado contra la candidata a la Presidencia de Rincón Chamula, una menor de edad fue lesionada por una bala.
Desde 2023, activistas y pobladores indígenas de Chiapas han venido denunciando un “ambiente de guerra” en la frontera sur de México, resultado de las pugnas del crimen organizado. Estas luchas internas han provocado desplazamientos forzados, desapariciones y asesinatos, creando una crisis humanitaria que afecta especialmente a los más jóvenes.
REDIAS hace un llamado urgente al Gobierno mexicano para que tome medidas inmediatas y efectivas. Entre las demandas se incluyen el reconocimiento oficial de la violencia en Chiapas, la implementación de políticas de protección integral para los menores de edad, y la intervención de organismos nacionales e internacionales para garantizar la seguridad y el bienestar de los niños y adolescentes en la región.
Las organizaciones que conforman REDIAS insisten en que la respuesta del Gobierno debe ser integral y coordinada. No basta con medidas aisladas; es necesario un plan de acción que aborde las raíces del conflicto y ofrezca soluciones duraderas. Esto incluye el fortalecimiento del sistema de justicia, la mejora de las condiciones socioeconómicas de las comunidades indígenas y la promoción de una cultura de paz y respeto a los derechos humanos.
La situación en Chiapas es una emergencia que requiere la atención inmediata de las autoridades y la sociedad en general. Los menores de edad, por su vulnerabilidad, necesitan una protección especial que garantice su seguridad y su derecho a una vida libre de violencia. La comunidad internacional también tiene un rol importante en monitorear y apoyar las acciones que se tomen para resolver esta crisis.
La violencia en Chiapas ha alcanzado niveles alarmantes, poniendo en riesgo la vida y el futuro de más de 200 mil menores de edad. La Red por los Derechos de la Infancia y Adolescencia en Chiapas ha hecho un llamado urgente al Gobierno de México para que reconozca y aborde esta grave situación. La protección de los niños y adolescentes debe ser una prioridad, y se requieren medidas inmediatas y efectivas para garantizar su seguridad y bienestar.
En un contexto de conflictos entre grupos políticos y armados, es imperativo que se tomen acciones concretas para detener la violencia y proteger a las comunidades más vulnerables. La implementación de políticas de protección integral y la intervención de organismos internacionales son pasos esenciales para asegurar que los niños y adolescentes de Chiapas puedan vivir en un entorno seguro y propicio para su desarrollo.