Chiapas reporta una disminución significativa en feminicidios, pero un notable incremento en homicidios dolosos
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
En el primer semestre de 2024, Chiapas experimentó un cambio en el panorama del crimen que reveló desafíos persistentes. El Observatorio Ciudadano Chiapas destacó una disminución del 2.3 por ciento en los homicidios culposos, con un total de 204 casos, lo que parece indicar un ligero progreso en la prevención de muertes no intencionales. Sin embargo, la cifra sigue siendo un 17.5 por ciento superior a los niveles de 2018.
En un giro inesperado, el número de feminicidios ha mostrado una reducción significativa del 38 por ciento, con solo 13 casos reportados. Este descenso podría ser un reflejo de las políticas de protección a mujeres implementadas en los últimos años, pero también plantea la cuestión de si estos datos son un indicador de verdadera mejora o una fluctuación temporal en un contexto más amplio de violencia de género.
Sin embargo, la tendencia menos alentadora proviene del aumento del 69.2 por ciento en los homicidios dolosos, con 357 casos. Este aumento es alarmante y podría indicar un deterioro en la estabilidad interna del estado, agravada por factores como el desplazamiento forzado y conflictos territoriales en comunidades locales. La elevación en estos delitos graves demanda una respuesta estratégica por parte de las autoridades.
La percepción de seguridad en ciudades como Tuxtla Gutiérrez y Tapachula se mantiene estable en comparación con trimestres anteriores, pero sigue siendo alta en comparación con otras ciudades del país. Este fenómeno podría estar vinculado a la violencia persistente en áreas específicas y el impacto del flujo migratorio, que agrava las tensiones sociales y económicas en la región.
El seguimiento al desplazamiento forzado, impulsado por conflictos políticos y territoriales, subraya la necesidad de abordar las raíces estructurales de la violencia en Chiapas. Las estrategias de seguridad deben ir más allá de la mera reacción a los delitos y considerar soluciones integrales que traten los conflictos subyacentes y promuevan una estabilidad duradera.