El cultivo de esta plana ofrece una solución sostenible para el medio ambiente, al capturar y almacenar CO2
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
Chiapas, en su papel de segundo productor nacional de hule, se ha consolidado como un modelo de desarrollo agrícola y ambiental. La región costera del Golfo de México, principal zona de cultivo, no solo impulsa la economía local, sino que también ofrece una solución sostenible para el cambio climático, al destacar el impacto positivo de la plantación de Hevea brasiliensis en el entorno.
El cultivo del hule se ha convertido en una alternativa valiosa para Chiapas, al generar beneficios económicos significativos y contribuyendo a la reducción de dióxido de carbono (CO2). Las plantaciones capturan y almacenan CO2, lo que refuerza su rol en la mitigación del cambio climático. Este aspecto ambiental agrega un valor crucial a la industria, además de los ingresos generados por la producción de látex.
Con una superficie actual de 29 mil 741 hectáreas, la producción de hule en México alcanzó 89 mil 323 toneladas en 2022, con un valor de producción de mil 131 millones de pesos. Chiapas contribuye con alrededor del 20 por ciento de esta producción, destacándose en municipios como Palenque y Tapachula. Este crecimiento constante en la producción refleja no solo la viabilidad económica del hule, sino también el potencial de expansión del cultivo en el estado.
El Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) ha introducido clones de alta calidad que optimizan la producción. La llanura costera sur del Golfo de México emerge como una región clave para la expansión, con un potencial significativo para aumentar la superficie sembrada y mejorar los rendimientos.
El proceso de producción del hule, desde la recolección del látex hasta la transformación en masa elástica, es fundamental para entender la relevancia del cultivo. La producción se inicia entre el quinto y séptimo año después de la plantación y puede durar hasta 30 años, lo que subraya la sostenibilidad y el impacto prolongado del cultivo. Así, Chiapas sigue siendo un pilar en la industria del hule, con un futuro prometedor en términos de crecimiento económico.