Desde los hechos han enfrentado un camino lleno de obstáculos, manipulación e indiferencia por autoridades
ARGENIS ESQUIPULAS/PORTAVOZ
Han pasado 15 años desde que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) liberó masivamente a los paramilitares responsables de la Masacre de Acteal, pero para las y los sobrevivientes de aquel trágico 22 de diciembre de 1997, la lucha por justicia no ha cesado. La organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal, formada por quienes sobrevivieron a la masacre y sus familias, sigue en pie de lucha, enfrentando un camino lleno de obstáculos, manipulación e indiferencia por parte de los gobiernos que han pasado desde entonces.
La Masacre de Acteal, en la que 45 personas, incluidos cuatro bebés no nacidos, fueron brutalmente asesinadas, ha sido un crimen de Estado que, según Las Abejas, ha sido deliberadamente olvidado y relegado por las autoridades. A lo largo de estos años, han sido testigos de cómo se ha intentado borrar la memoria de los hechos, tratando de mantener impune a los responsables intelectuales de la masacre, permitiendo que sigan en el poder quienes orquestaron y permitieron este crimen.
Las y los miembros de Las Abejas de Acteal se identifican como un grupo con memoria, comprometido con la justicia y la verdad. Han denunciado que los diversos gobiernos, sin importar su afiliación partidista, han gobernado con la misma ambición y avaricia, dejando a un lado el dolor y la búsqueda de justicia de quienes sufrieron la pérdida de sus seres queridos en la masacre.
El dolor de las y los sobrevivientes es profundo. Las secuelas de aquel día han dejado marcas imborrables, especialmente en las mujeres que sufrieron el terror del ataque paramilitar. Muchas de ellas han padecido enfermedades derivadas del pánico y la crisis psicológica, y el panorama actual en Chiapas no es alentador. La violencia en la región ha escalado a niveles alarmantes, con comunidades enteras, como las de Pantelhó y Chenalhó, siendo desplazadas forzadamente debido a la presencia de grupos armados. Lo que más indigna a Las Abejas es la aparente complicidad del Ejército Mexicano y la Guardia Nacional, quienes, según denuncian, permiten que estos actos ocurran sin intervenir.
Las Abejas han señalado que la liberación de los autores materiales de la masacre por parte de la SCJN fue un acto de injusticia que perpetuó la impunidad. Asimismo, acusan que una campaña en 2006, liderada por diversas figuras y organizaciones, con el respaldo del entonces presidente Felipe Calderón, contribuyó a cimentar esta impunidad. Para Las Abejas, el resultado de esta colusión ha sido devastador para Chiapas, llevando a la región al borde de una guerra civil, tal como advirtió el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en sus comunicados.
En medio de este oscuro panorama, la organización mantiene viva la esperanza y el compromiso con la paz. Las Abejas de Acteal se consideran las guardianas de la memoria y las constructoras de la justicia. Sin embargo, su lucha se complica cada día más debido a la falta de acción de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que aún no ha emitido un informe de fondo sobre el Caso 12.790, relacionado con la Masacre de Acteal. Las Abejas temen que la inacción de la CIDH y del Gobierno mexicano continúe alimentando la violencia y el desplazamiento forzado en la región.
Con firmeza, Las Abejas exigen a la CIDH que emita el informe de fondo que responsabilice al Estado mexicano por la Masacre de Acteal, y que se inicie un juicio contra los autores intelectuales, incluyendo al expresidente Ernesto Zedillo Ponce de León. Para ellas, esta es una demanda urgente y necesaria para honrar la memoria de las 45 víctimas y detener el derramamiento de sangre en Chiapas y en todo México.
Finalmente, Las Abejas de Acteal hacen un llamado a la sociedad civil para que se una a su lucha, levantando la voz y realizando acciones no violentas en contra de la impunidad y la violencia que persisten en el país. Invitan a la ciudadanía a exigir a los tres órdenes de Gobierno que cumplan con su obligación de proteger y garantizar la seguridad de todas y todos los mexicanos, recordándoles que existen tanto la Constitución mexicana como tratados internacionales que les obligan a hacerlo.
Desde Acteal, Casa de la Memoria y Esperanza, Las Abejas de Acteal reafirman su compromiso con la justicia y la verdad, manteniendo viva la memoria de sus seres queridos y luchando por un futuro en el que la impunidad no tenga cabida.
Después de 22 años de omisión, el Gobierno de México se planteó trabajar para alcanzar la paz en Acteal, por lo cual desde el inicio de la actual administración y con el acompañamiento permanente de las autoridades del estado de Chiapas, se establecieron pláticas con un grupo de sobrevivientes y familiares de víctimas de esta tragedia, con ánimo de buscar y concretar acuerdos como vía para acercar la comunidad a la justicia y la unidad.
Las víctimas sobrevivientes y familiares acudieron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Su petición fue recibida el 2 de marzo de 2005 y registrada como P- 212-05; luego de que las partes presentaran sus observaciones, el 1 de noviembre de 2010 la CIDH emitió el informe de admisibilidad 146/10.
De esta forma, el 3 de septiembre de 2020, el Estado mexicano ofreció una disculpa pública a personas sobrevivientes y familiares de víctimas, así como a la comunidad de Acteal y al pueblo tsotsil por el profundo agravio del que fueron objeto.
Tanto la elaboración del documental Acteal: barbarie y memoria, como su difusión, dan cumplimiento por parte del Estado mexicano a una de las acciones establecidas en la ruta de reparación integral del daño a las víctimas de lo sucedido hace más de dos décadas en esa comunidad.
Además de las personas sobrevivientes y familiares de las víctimas de la masacre de Acteal, estuvieron presentes el obispo coadjunto de San Cristóbal de Las Casas, Fray Raúl Vera; el sacerdote jesuita en la Arquidiócesis del mencionado municipio, Pedro Arriaga Alarcón; el miembro de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) en 1997, Gilberto López y Rivas; la exdirectora del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba), Blanca Isabel Martínez; el activista y asesor en derechos humanos, Alberto Athié Gallo; y el vocero del Concejo de la Organización de la sociedad civil Las Abejas.
Asimismo, el exsubprocurador general de la República de 1997 a 2000, Everardo Moreno Cruz; el exministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), José Ramón Cosío Díaz; y el exdirector de Comunicación Social de Presidencia de la República durante 1997-2000, Fernando Lerdo de Tejada.
También, el abogado especialista en casos de derechos humanos, representante del concejo Las Abejas, Leonel Rivero Rodríguez; la historiadora y autora del libro El dolor de Acteal, Mónica Uribe M.; el académico e investigador de El Colegio de México y especialista en temas de seguridad nacional, Sergio Aguayo Quezada; el periodista Carlos Marín Martínez y el periodista, analista político y escritor, Ricardo Raphael.
Además, el exsubsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración 2019-2023, Alejandro Encinas Rodríguez; el abogado y actual titular de la Fiscalía Especializada en materia de Delitos Electorales (Fisel) de la Fiscalía General de la República (FGR), José Agustín Ortiz Pinchetti.
Asistieron a la presentación la titular de la Comisión para el Diálogo con los Pueblos Indígenas de México, Josefina Bravo Rangel; la directora de derechos humanos de la Secretaría General del Gobierno de Chiapas, Geyri Sánchez Espinosa; el representante legal ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de Las Abejas, Leonel Guadalupe Rivero Rodríguez; el director de Diálogo y Concertación en la Comisión para el Diálogo con los Pueblos Indígenas de México, Marcos Shilón Gómez.