Este caso es un recordatorio del peligro que enfrentan los luchadores sociales en la región
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
A cinco años de uno de los crímenes más atroces contra defensores de derechos humanos en
Chiapas, la herida sigue abierta. El Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero reiteró su
exigencia de justicia por el asesinato de Noé Jiménez Pablo y José Santiago, integrantes del
Movimiento por la Paz, la Justicia y el Bien Común de Amatán, quienes fueron desaparecidos y
hallados sin vida con señales de tortura el 17 de enero de 2019.
La respuesta de las autoridades ha sido insuficiente y llena de omisiones. La Comisión Nacional de
los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación en 2020, donde señaló que los
perpetradores del crimen actuaron con la complicidad y tolerancia del Estado. Sin embargo, la
falta de aceptación de esta recomendación por parte de las autoridades estatales y municipales en
Chiapas ha dejado en evidencia la impunidad que rodea este caso.
La falta de justicia envía un mensaje de desprotección a las comunidades que luchan por sus
derechos. El llamado del Centro Zeferino Ladrillero es una demanda urgente para que se
implementen medidas que prevengan la repetición de estos hechos. Las recomendaciones de la
CNDH, que incluyen la atención integral a las víctimas y la creación de un memorial, son pasos
necesarios, pero solo si se acompañan de acciones concretas para sancionar a los responsables.
El silencio de las autoridades ante estos crímenes no solo alimenta la impunidad, sino que
desmoraliza a quienes continúan defendiendo derechos en el estado. La memoria de Noé Jiménez
Pablo y José Santiago deben tener acceso a la justicia efectiva. Las autoridades tienen que asumir
su responsabilidad en la protección de los defensores de derechos humanos.
El caso de Amatán es un símbolo de la lucha más amplia por los derechos en México. La
comunidad internacional y los luchadores sociales deben presionar para que este crimen no quede
en el olvido, y que la justicia, aunque tardía, llegue para las víctimas y sus familias.