La capital de Chiapas ha reducido deudas y mejorado su perfil financiero, atrayendo confianza para futuras inversiones
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
La capital chiapaneca posee estabilidad financiera, tras lograr una calificación crediticia positiva que refuerza su perfil ante los mercados y las calificadoras. Según la Tesorería municipal, esta calificación, otorgada por la firma HR Ratings, refleja la evolución económica de la ciudad y sienta las bases para una gestión con alto nivel de liquidez. Esta perspectiva no solo confirma el buen manejo de las finanzas públicas, sino que también plantea un nuevo reto: mantener y mejorar esta posición en los años venideros.
El titular de la Tesorería, Carlos Agustín Gorrosino, resaltó que esta evaluación crediticia, aunque técnica, tiene implicaciones reales para los ciudadanos. Una calificación AA con perspectiva positiva indica que la capital ha logrado reducir riesgos financieros y se perfila como un ente confiable en el cumplimiento de sus obligaciones. Este avance es significativo, puesto que el municipio recurría a créditos de corto plazo para sortear problemas de liquidez.
La importancia de estas calificaciones no se limita a números o a escalas complejas; se traduce en una mayor capacidad del municipio para financiar proyectos y mejorar servicios sin depender de la deuda. Con una perspectiva estable que ha cambiado a positiva, Tuxtla Gutiérrez se encuentra en la antesala de una posible mejora en su calificación. Esta evolución también muestra un esfuerzo constante por parte de las autoridades para gestionar recursos de manera responsable y transparente.
El análisis de HR Ratings evidencia que el balance financiero de la capital ha pasado de ser un problema a un punto fuerte. Esto se refleja en una administración que gasta menos de lo que ingresa y que ha logrado reducir sus niveles de deuda. Este enfoque no solo mejora la calificación crediticia, sino que permite un crecimiento económico más sólido y sustentable en el largo plazo.
La transformación financiera de Tuxtla Gutiérrez no es solo un logro de la Tesorería, sino un reflejo de una gestión pública que ha priorizado el control del gasto y la reducción de la deuda. La calificación crediticia es más que un reconocimiento; es una invitación a seguir por el camino de la responsabilidad fiscal, que aspira a una calidad crediticia superior que beneficie a todos los habitantes.