El éxodo ha incrementado con la implementación de CBP One, lo que distorsiona la demanda turística habitual
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
La actividad turística en Tapachula ha experimentado una notable caída en los últimos meses, en especial en el turismo recreativo, como resultado de la temporada baja y el incremento en los precios de los boletos de avión. Según el presidente de la Asociación de Agencias de Viajes de la zona Soconusco, Manrique Legorreta, la baja demanda refleja un escenario complicado para el sector, que se enfrenta a retos no solo estacionales, sino también económicos y de movilidad.
A pesar de que algunas rutas aéreas presentan demanda, este incremento está impulsado por cuestiones migratorias y no por turismo. Tapachula se ha convertido en un punto estratégico debido a la implementación del sistema CBP One, que facilita a los migrantes obtener citas con las autoridades migratorias estadounidenses desde esta ciudad. Este fenómeno, conocido como “turismo étnico”, ha distorsionado el panorama habitual del turismo recreativo.
Otro sector golpeado ha sido el turismo empresarial. Las innovaciones tecnológicas, como las reuniones virtuales, han reducido la necesidad de desplazamientos, esto limita aún más el flujo de visitantes que solían viajar por negocios. Asimismo, el turismo de compras ha experimentado una caída, al reflejar cambios en las dinámicas de consumo y desplazamiento en la región.
En contraste, destinos nacionales como Cancún y Huatulco han emergido como las preferencias principales para los viajeros de Tapachula y zonas cercanas, incluidos guatemaltecos. La seguridad en las carreteras, o más bien su falta, ha convertido los vuelos directos, como el de Tuxtla-Cancún, en una opción más atractiva para quienes buscan combinar economía y seguridad en sus desplazamientos.
El sector turístico espera que con la llegada de la nueva administración se fortalezcan las medidas de seguridad, tanto en las carreteras como en la región en general, debido a que la percepción de inseguridad sigue siendo uno de los principales obstáculos para la recuperación del turismo en la zona. Los empresarios confían en que este cambio podría ser el impulso necesario para revitalizar un sector crucial para la economía local.