Se comprometió a reconocer los derechos de pueblos indígenas y a fomentar una entidad más unida
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
Con el cierre del sexenio de Andrés Manuel López Obrador, hoy inicia una nueva etapa de la Cuarta Transformación en México, liderada por Claudia Sheinbaum, quien ha hecho historia al convertirse en la primera presidenta del país. Científica y académica de formación, Sheinbaum es miembro fundador del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y ha desempeñado roles clave en la administración pública, incluyendo su labor como jefa de Gobierno de la Ciudad de México y secretaria de Medio Ambiente del Distrito Federal. Sus estudios en la Facultad de Ciencias y la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) la respaldan como una líder comprometida con el desarrollo sostenible y la justicia social.
Durante su campaña presidencial, Sheinbaum realizó un recorrido intensivo por el país, poniendo especial énfasis en Chiapas, un estado fundamental para su agenda. En su visita al estado, en el mes de abril, congregó a más de 65 mil personas en seis mítines donde se abordaron las principales preocupaciones de la ciudadanía: acceso a la salud y oportunidades de empleo.
Los mítines en Tila, Chilón y Las Margaritas se convirtieron en espacios de diálogo, donde la candidata escuchó con atención las demandas de los chiapanecos. Una de sus propuestas más destacadas fue la implementación del nuevo Sistema de Salud IMSS-Bienestar, que garantizará la dotación de recursos médicos y medicamentos gratuitos en todos los centros de salud de la entidad. “Nos vamos a poner de acuerdo para fortalecer todos los centros de salud, por más apartados que estén”, prometió Sheinbaum.
Además, la candidata se comprometió a apoyar a los cafeticultores de la región, con la intención de mejorar el esquema de comercialización para que obtengan precios justos por su producto. Este enfoque en la agricultura reflejó su interés por revitalizar la economía local, al beneficiar a quienes trabajan la tierra y asegurar un futuro más prometedor para sus familias.
En Chilón, junto a Eduardo Ramírez Aguilar, ahora gobernador electo, Sheinbaum anunció la intención de habilitar la autopista Palenque-San Cristóbal de Las Casas. Este proyecto de infraestructura, con un aproximado de 50 kilómetros, será ejecutado en colaboración con las comunidades locales, puesto que el objetivo fue enfatizar su compromiso con el desarrollo regional.
La visita continuó con paradas en Comitán, Motozintla y Tapachula, donde Sheinbaum resaltó su afecto por la regióny sus comunidades indígenas, muchas de las cuales enfrentan desafíos como la violencia del crimen organizado. Su discurso incluyó un fuerte llamado a dignificar el trabajo de las mujeres en el estado, prometiendo servicios médicos mejorados y becas para estudiantes de todos los niveles educativos.
En su presentación en Tapachula, la presidenta destacó su visión de convertir a la ciudad en la “capital de Centroamérica”, enfocándose en un plan de industrialización que fomente un manejo humano de la migración. “La inversión con bienestar y sustentabilidad la vamos a traer a Tapachula y a toda la frontera sur de Chiapas”, afirmó, al anticipar beneficios tanto para la población local como para los migrantes.
Un componente crucial de su estrategia es la expansión del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, un proyecto que busca conectar el Pacífico con el Atlántico y estimular la economía de la región. Sheinbaum destacó que este desarrollo no solo beneficiará a Chiapas, sino que también creará empleo y bienestar para todos los habitantes.
En su gira de cierre de campaña en mayo, reafirmó que los programas sociales de López Obrador no solo se mantendrían, sino que se ampliarían. Prometió un apoyo especial para mujeres mayores de 60 años y una beca universal para estudiantes de educación básica, expresó una vez más su compromiso con la educación y el empoderamiento social.
Sheinbaum también hizo hincapié en la necesidad de abrir más preparatorias en los pueblos, al señalar que la educación es fundamental para la prevención del delito. Al mismo tiempo, se comprometió a reforzar la Guardia Nacional (GN) para garantizar la seguridad en la región y en las comunidades afectadas por la presencia del crimen organizado.
Uno de los pilares de su plataforma es el reconocimiento y fortalecimiento de los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos, a quienes prometió autonomía en la gestión de sus territorios y recursos. “Los pueblos indígenas serán sujetos de derechos, y sus planes de justicia se plasmarán en la Constitución”, aseguró.
La presidenta electa también se comprometió a impulsar programas específicos que beneficien a las comunidades rurales, centrándose en la producción de maíz y café. “Queremos que haya precios justos para nuestros productores”, enfatizó y refrendó su visión con la necesidad de justicia económica.
Sheinbaum también abordó el tema de la violencia en Chiapas, prometiendo un enfoque integral que incluya la educación y el desarrollo social como herramientas clave para reducir la delincuencia. “La educación es la base para construir un futuro seguro”, afirmó ante sus seguidores.
A medida que se acercan los retos de su administración, la nueva presidenta expresó su deseo de trabajar en colaboración con las comunidades chiapanecas. “Juntos, construiremos un Chiapas más fuerte y unido”, afirmó con determinación.
Asimismo, en su visita a Tuxtla Gutiérrez, Sheinbaum reiteró su compromiso de fomentar un desarrollo sostenible que respete el medio ambiente y apoye a las comunidades locales. “No podemos olvidar la importancia de cuidar nuestros recursos naturales mientras avanzamos hacia el progreso”, concluyó.
Claudia Sheinbaum asume la Presidencia con una visión clara y un enfoque renovado hacia Chiapas, donde las promesas de desarrollo integral, justicia social, seguridad y atención a las necesidades de los pueblos originarios se convierten en el eje de su Gobierno. Este nuevo sexenio en la historia de México mantiene altas expectativas de construir un futuro mejor para todos los chiapanecos, especialmente para aquellos que han sido marginados por décadas.