Apuestan por una nueva estrategia alimentaria que promete precios justos y canales de comercialización
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
La reciente fusión de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) y Diconsa para crear el área “Alimentación para el Bienestar” podría marcar un cambio significativo en el panorama agrícola de México. La presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, reconoció la corrupción asociada con Segalmex y propuso un nuevo modelo que busca restablecer la confianza de los productores. Sin embargo, la clave del éxito radicará en la implementación de esta iniciativa y en cómo se gestionarán los recursos destinados al sector agrícola.
La nueva área, que será dirigida por María Luisa Albores González, tiene el potencial de ofrecer un canal directo de comercialización para pequeños productores de cultivos como café, frijol y cacao. Este enfoque se alinea con la necesidad de asegurar precios justos y condiciones de mercado que beneficien a quienes sostienen la economía rural. No obstante, el optimismo inicial se encuentra matizado por el escepticismo de los productores, quienes han sido testigos de promesas incumplidas en el pasado.
Los agricultores expresaron su cautela ante lo que consideran una repetición de las experiencias pasadas. En su opinión, el Gobierno debe escuchar a quienes conocen de primera mano las dificultades del campo. La falta de insumos a tiempo y el reto de enfrentar condiciones climáticas adversas son solo algunas de las inquietudes que los productores desean que se tomen en cuenta en este nuevo modelo.
La vinculación con programas como “Sembrando Vida” puede ser un aspecto clave para garantizar un futuro más sostenible para los pequeños productores. Sin embargo, esta conexión debe ir acompañada de acciones concretas que promuevan el bienestar y la autosuficiencia de las comunidades agrícolas.
La fusión de Segalmex y Diconsa representa una oportunidad única para transformar la política agrícola en México. La esperanza de un nuevo inicio está presente, pero dependerá de la capacidad del Gobierno para responder a las necesidades reales de los productores.