La ausencia de un sistema adecuado para registro y foliado refuerza preocupaciones sobre
legitimidad en infracciones
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
En Bochil, la reciente intervención del Gobierno municipal de Sergio Zenteno Meneses en el
ámbito del tránsito ha generado frustración entre conductores y transportistas. La medida, que ha
incrementado el número de infracciones y operativos en la vía pública, ha sido recibida como un
acto de hostigamiento por muchos de los afectados. La falta de claridad en el proceso y la ausencia
de foliado en las multas ha alimentado la sospecha de que la disposición podría no contar con la
autorización adecuada de las autoridades estatales.
Transportistas concesionados, que prestan servicios en Bochil, argumentaron que la Delegación de
Tránsito del Estado ya cubre la zona, por lo que consideran innecesario duplicar funciones con una
nueva instancia municipal. A pesar de que la intención de ordenar el tráfico es bienvenida, la
mayoría de los transportistas sostiene que las acciones deberían realizarse en coordinación con la
Secretaría de Seguridad Estatal, a fin de evitar confusión y desorden.
Comerciantes y pobladores también han levantado la voz, al criticar lo que consideran un exceso
de poder por parte de la administración local. Se ha mencionado que, además de los operativos de
tránsito, Zenteno Meneses estaría involucrado en la ejecución de obras públicas a través de
prestanombres, lo que aumenta la percepción de que las multas y sanciones viales forman parte
de una estrategia de enriquecimiento personal.
El impacto de esta medida es evidente. Muchos conductores se sienten vulnerables ante la
posibilidad de ser multados sin justificación clara, y la falta de transparencia en los procedimientos
de infracción genera dudas sobre la legalidad de las sanciones.
La creciente desaprobación de la comunidad podría poner en riesgo no solo la relación con los
conductores, sino también con otros sectores de la población que exigen un Gobierno más
responsable y menos centrado en intereses personales.