Ningún municipio en la región alcanzó los niveles altos de sueldos, lo que reflejó desigualdad económica
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
El panorama económico de los municipios en Chiapas, según los datos recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), evidenció una realidad preocupante: ninguno de sus municipios alcanza los niveles de ingreso considerados altos o muy altos en el país. Incluso Tuxtla Gutiérrez, con un ingreso promedio trimestral de 62 mil 411 pesos por hogar, apenas logra clasificarse en el estrato alto medio.
En la mayoría de los municipios chiapanecos, los ingresos promedio se concentran en los estratos bajos y bajos medios, lo que refleja el impacto de una economía local poco diversificada y con limitadas oportunidades laborales. Esta situación no solo perpetúa la pobreza, sino que también pone de manifiesto la necesidad de políticas públicas más focalizadas para combatir las disparidades económicas y sitúa a la entidad dentro de los tres estados con menores sueldos del país.
El contraste entre la comarca y otras regiones del país subraya la urgencia de generar estrategias para aprovechar el potencial del estado en sectores como el turismo, la agricultura sostenible y la industria energética. Sin embargo, la falta de infraestructura, educación de calidad y acceso a servicios básicos sigue siendo un obstáculo para convertir estas oportunidades en motores de crecimiento económico real.
Además, los datos del Inegi pusieron en evidencia que la región no solo enfrenta un problema de ingresos bajos, sino también de distribución desigual de la riqueza. Mientras que municipios como Tuxtla Gutiérrez logran destacar dentro del contexto local, otros municipios enfrentan ingresos mucho más bajos, lo que agrava las brechas económicas internas.
La situación estatal no puede ser abordada desde una perspectiva estadística; debe ser el punto de partida para un replanteamiento integral de las estrategias de desarrollo regional. Inversiones en educación, salud, y conectividad, acompañadas de políticas que fomenten la economía local, serán clave para transformar las condiciones económicas de sus municipios y garantizar un futuro más equitativo para sus habitantes.