Es una historia de ficción basada en el cambio climático y la teoría del deslizamiento
de tierra
PORTAVOZ/STAFF
La producción audiovisual más ambiciosa del cine noruego se estrenará el 12 de
diciembre de 2024 en Netflix con el título de la isla en la que se rodó, La Palma, donde
transcurre una historia de ficción basada en el cambio climático y la teoría del
deslizamiento de tierra.
El rodaje se desarrolló en La Palma en 2023 bajo la cobertura de Volcano Films y ahora
está en fase de postproducción en Netflix, la plataforma que apostó por la propuesta
de la productora noruega Fantefilm hace más de cuatro años.
Esta productora, conocida por exitosas películas como The Wave o The Quake, ha sido
parte activa en el novedoso género llamado Scandisaster, basado en desastres
naturales, según ha recordado Volcano Films.
En el caso de La Palma, el proyecto tenía intención de ser rodado hace varios años,
pero el proyecto fue paralizado por la erupción del volcán Tajogaite, y retomado años
después.
A este respecto, los productores noruegos recuerdan cómo la película The Wave
resultó ser un revulsivo turístico y científico para la ciudad noruega de Stranda, donde
se rodó dicha producción.
CONTRATOS
En su nota Volcano Films detalla que en La Palma se contrataron unos mil extras y 20
actores secundarios canarios y españoles frente a las cámaras, así como 100
trabajadores permanentes durante cinco meses para la preparación y el rodaje, y otros
200 de manera eventual.
Además, fueron necesarios servicios en alquileres, hospedaje, restauración,
proveedores, industria y transportes.
Volcano Films celebra que el proyecto audiovisual escandinavo más ambicioso hasta la
fecha lleve por título el nombre de una de las islas, y que la trama se desarrolle
enteramente en ella, y afirma que el impacto de esta serie en el territorio escandinavo
puede generar un posicionamiento aún mayor de La Palma como destino turístico en
ese mercado.
El hecho de que esta producción se rodara en una gran parte en una isla no capitalina
refuerza además el interés internacional por estos territorios, pues se confirma que es
factible emprender rodajes en ellas, lo que redunda a su vez en que Canarias como
destino cinematográfico amplía su oferta de localizaciones y valida su competitividad a
nivel internacional.
“Tras el cese de la huelga del sector en Estados Unidos, además, no cabe esperar más
que más años buenos”, afirma la productora, que señala que cada producción
contribuye a un sector “cada vez más musculado” y a que se generen puestos de
trabajo de alta cualificación “e intensidad salarial”.