En las exigencias se encuentra la contratación de un asesor político y el 70 por ciento respecto a
su sueldo
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
En medio de la efervescencia de nuevos legisladores en Chiapas, un conflicto emergió al momento
que la diputada suplente del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Olga Mabel López, alzó
la voz contra presuntas extorsiones y amenazas por parte de su antecesora.
Martha Guadalupe Martínez Ruiz solicitó licencia, exige un sorprendente 70 por ciento del sueldo,
situación que generó un dilema y elevó las tensiones detrás del telón político.
Olga Mabel López, recién investida como diputada suplente, denunció una situación que desafía la
ética política: la extorsión y amenazas por parte de Martha Guadalupe Martínez Ruiz, quien dejó
de manera temporal su cargo.
La exigencia de Martínez Ruiz consta de atribuirse un porcentaje significativo del sueldo de la
funcionaria activa y la retención de un asesor con un salario de 30 mil pesos, esto ha llevado a
López a plantarse ante lo que ella califica como chantaje y violencia política.
En un escenario donde la transparencia brilla por su ausencia, Mabel López, en su corto tiempo en
el cargo, se niega a ceder a las presiones financieras de Martínez Ruiz. Este conflicto saca a la luz
una práctica turbia dentro del Congreso de Chiapas, donde quienes piden licencia buscan
mantener el control económico y operativo de sus posiciones, incluso a expensas de quienes los
suplen de forma temporal.
La diputada suplente, con firmeza, rechazó las demandas desproporcionadas y espera que su
resistencia destape una problemática más amplia que afecta a otros suplentes en situaciones
similares.
Mientras la Mesa Directiva del Poder Legislativo asume la tarea de resolver este conflicto, la
situación deja al descubierto las tensiones y prácticas poco transparentes que persisten en la
política chiapaneca, lo que marca el inicio de la nueva Legislatura con desafíos éticos.