Pobladores suplican un plan de acción que restituya la paz y que garantice condiciones de
seguridad
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
La remota comunidad de San Clemente, ubicada en el municipio de Pantelhó, se ha convertido en
el escenario de una crisis humanitaria, donde al menos 10 maestros se encuentran atrapados,
incapaces de salir debido a los persistentes enfrentamientos entre diferentes grupos armados
locales.
La situación, derivada del conflicto territorial que azota a San Clemente y Chimix, ha dejado a estos
educadores en un estado de vulnerabilidad extrema desde el pasado jueves 8 de febrero. La
violencia desatada ha generado no solo un ambiente de riesgo para los maestros, sino también ha
puesto en peligro la vida de los habitantes locales, sumiéndolos en una espiral de pánico y temor.
A pesar de la gravedad de la situación, tanto la Secretaría de Educación como la Secretaría de
Seguridad Pública del Estado han guardado silencio, sin emitir pronunciamientos ni tomar medidas
concretas para abordar este percance.
Mientras tanto, los enfrentamientos continúan sin cesar en la zona, lo que intensifica el riesgo que
corren los profesores y las afectaciones a la población que se ve atrapada en medio de esta
violencia desmesurada.
El conflicto en Pantelhó no solo ha generado la lamentable situación de los maestros atrapados,
también ha provocado un aumento alarmante de desplazados y pérdidas humanas. La falta de
intervención efectiva de las autoridades agrava la crisis, al permitir una ola de ataques
indiscriminados en esta demarcación territorial, exhibiendo la fragilidad de la población y la
impotencia ante la ausencia de una respuesta gubernamental inmediata y eficaz.
Los residentes de Pantelhó y la comunidad educativa esperan con angustia una intervención
urgente que brinde seguridad y protección tanto a los maestros atrapados como a la población
local que vive bajo la amenaza constante de la violencia desbordada en esta región chiapaneca. La
necesidad de atención inmediata y acciones concretas resuena en medio de la desesperación que
envuelve a San Clemente y sus alrededores.
