El alza de insumos alimenticios impactan en márgenes de ganancia para dicho sector
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
En medio de una crisis económica persistente, los establecimientos de venta de alimentos en
Tapachula han experimentado una notable disminución en la afluencia de clientes durante los
primeros cinco meses del año. Esta situación ha generado preocupación entre los propietarios y
gerentes de restaurantes, quienes enfrentan dificultades para mantener la rentabilidad de sus
negocios.
La gerente de un restaurante bien establecido en el centro de la ciudad, Karla González, compartió
su preocupación por las ventas, las cuales han descendido hasta alcanzar solo la mitad de su nivel
habitual. Esta baja en la actividad comercial ha puesto en aprietos a muchos empresarios del
sector, quienes se esfuerzan por mantener en función sus establecimientos y cumplir con sus
compromisos financieros.
Según González, la situación actual solo permite cubrir los gastos básicos, como el pago a
proveedores, servicios públicos y salarios del personal, sin dejar márgenes de ganancia
significativos. La falta de flujo de clientes regulares ha sido atribuida a la difícil situación
económica que enfrentan las familias en la región.
Por otro lado, la propietaria de otro restaurante, señaló que el incremento constante en los
precios de los productos básicos ha complicado aún más la situación. La inflación ha impactado en
los márgenes de ganancia del sector gastronómico, esto obliga a los empresarios a ajustar los
precios de los platillos para adaptarse a las nuevas condiciones económicas.
En respuesta a esta crisis, muchos propietarios y gerentes buscan estrategias para mantener la
viabilidad de sus negocios, incluyendo la optimización de costos y la mejora en la calidad del
servicio. Sin embargo, la incertidumbre económica persistente plantea desafíos significativos para
la industria gastronómica local, la cual juega un papel importante en la generación de empleo y el
dinamismo económico de la ciudad de Tapachula.