Los puntos de control, ubicados en vías hacia Ocosingo, San Cristóbal y Comitán, buscan prevenir el ingreso de vehículos sospechosos
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
Los ejidatarios y residentes de la cabecera municipal de Altamirano han implementado medidas de seguridad drásticas ante la reciente ola de violencia en la región. Este jueves, instalaron tres bloqueos en las principales salidas del municipio para controlar el acceso de personas desconocidas y prevenir situaciones peligrosas.
Los puntos de control están ubicados en el tramo carretero que conecta Ocosingo con el ejido Morelia, así como en los cruceros que conducen a San Cristóbal de Las Casas y Comitán. Esta estrategia busca evitar la entrada de vehículos o motociclistas que puedan representar una amenaza para la seguridad de la comunidad.
En cada uno de los bloqueos, los residentes verifican los vehículos que intentan ingresar al municipio. Esta medida se ha tomado en respuesta a los frecuentes tiroteos que han tenido lugar tanto en el centro como en la periferia de Altamirano. El incidente más reciente ocurrió la noche del pasado martes, donde se reportaron dispararos en el Parque Central y causaron un corte de energía eléctrica.
La comunidad ha señalado que el cierre de estas vías será indefinido. Por ello, se solicita a los automovilistas portar una identificación oficial y explicar el motivo de su visita, de lo contrario, se les negará la entrada. Esta decisión se fundamenta en el deseo de los habitantes de proteger su seguridad y mantener el orden ante la creciente inseguridad.
Este contexto de inseguridad no es exclusivo de Altamirano. Diversas localidades de la región han reportado incidentes similares, lo que ha llevado a un aumento en la preocupación por la seguridad pública. Las autoridades estatales evalúan la situación y consideran la implementación de estrategias adicionales para apoyar a las comunidades afectadas.
En resumen, los habitantes de Altamirano han decidido tomar medidas proactivas para protegerse ante la violencia que ha marcado sus vidas. Con bloqueos en las principales salidas del municipio y controles rigurosos de entrada, buscan garantizar la seguridad y tranquilidad de su comunidad.