CUESTIÓN DE ENFOQUES
Juan Pablo Zárate Izquierdo*
El estado de Chiapas siempre había sido considerado uno más de la República Mexicana. Situado en el sureste de México y siendo la frontera más lejana, se vivió durante mucho tiempo una marginación no sólo en el ámbito social oen términos de pobreza, sino en materia política, la entidad pues, vivía en un abandono hasta del ejercicio de la participación ciudadana.
Durante años, la designación del candidato a gobernador, o incluso el mismo gobernador, se dictaba desde el centro del país y, así, se vivió una etapa de gobernadores sin arraigo e incluso una época de interinatos donde los chiapanecos se enteraban del próximo gobernador, a través de las notas periodísticas.
Y así se vivieron muchos interinatos, entre los cuales se recuerda a Elmar Setzer Marseille, Javier López Moreno, el gobierno de unas semanas de Eduardo Robledo Rincón que dio paso al interinato de Julio Cesar Ruiz Ferro y Roberto Albores Guillén.
Chiapas vivió un periodo de 5 gobernadores en tan solo 7 años, desde enero de 1993 a diciembre del año 2000.
Fue hasta el año 2000 que la entidad comenzó a experimentar un fenómeno de participación política social, en la cual la participación ciudadana jugó un papel importante.
A partir de ese momento se ha estabilizado la vida política para los chiapanecos pues ya no ronda la figura de los interinatos y, por fin, se logró tener a un gobernador de seis años.
Encabezado por la coalición “Alianza por Chiapas”, el entonces candidato Pablo Salazar Mendiguchía logró conjuntar 8 partidos de manera histórica: al Partido Acción Nacional, Partido de la Revolución Democrática, Partido del Trabajo, Convergencia, Partidos Verde Ecologista de México, Partido Alianza Social, Partido del Centro Democrático y el Partido Nacional Socialista ya que se deseaba “sacar al PRI de los Pinos” y, salió victorioso con un total de 535, 860 votos, seguido de Sami David Davidque logró 475, 267 votos, quien contendió por el PRI.
Salazar Mendiguchía estuvo al frente de su gobierno durante todos los seis años de la administración gubernamental y se le ha recordado como el gobernador del progreso y de la obra pública en Chiapas.
Para las siguientes elecciones con una estabilidad política, Chiapas vivió su siguiente elección en 2006. En ella participó Juan Sabines Guerrero con la coalición “Por el Bien de Todos” integrada por el Partido de la Revolución Democrática, Partido del Trabajo y Convergencia, resultando electo con un total de 544, 515 votos, seguido de José Antonio Aguilar Bodegas quien obtuvo 538, 313 votos; una votación muy cerrada, pero que logró continuar la estabilización de la vida política en Chiapas, pues se tuvo a un gobernador para los próximos seis años sin interrupción alguna.
Ya en el 2012, la entidad experimentó una elección más en la que participó Manuel Velasco Coello, encabezando a la coalición “Compromiso por Chiapas” que integraba el Partido Verde Ecologista de México, el Partido Revolucionario Institucional y el Partido Nueva Alianza, obteniendo una mayor participación ciudadana con un total de 1,343,979; seguido de María Elena Orantes, que encabezó la coalición “Movimiento Progresista Por Chiapas” conjuntando al Partido de la Revolución Democrática, Partido del Trabajo y Movimiento Ciudadano, con un total apenas de 348,506 votos.
Chiapas ya vivía una estabilidad de la vida política con gobernadores de seis años.
Para el 2018, en la elección de nuevo gobernador para Chiapas, se vivían momentos de una participación ciudadana estable, en la que, incluso, se vivió momentos de una inercia del triunfo presidencial de Andrés Manuel López Obrador en la entidad.
En el 2018, participó Rutilio Escandón Cadenas, ahora, bajo las siglas de un nuevo partido político: Morena,construyendo la Coalición “Juntos Haremos Historia” con el partido del Trabajo y el Partido Encuentro Social, con el que logró 922, 111 votos; seguido de Fernando Castellanos, que encabezó la Coalición “La Fuerza de Chiapas” con una votación de 474, 521 votos.
Ahora, siguiendo la estadística de datos electorales en una entidad que se ha estabilizado políticamente, en la que contamos ya con actores políticos consolidados, viviremos en este 2024 una de las elecciones con mayor participación ciudadana.
Pero no solamente se logrará una mayor participación ciudadana, sino que se vivirán elecciones históricas.
En este 2024 contienden Eduardo Ramírez Aguilar que, así, históricamente, ha logrado conjuntar el mayor número de partidos para integrar una coalición: 9 partidos políticos. Tanto el Partido Morena, Partido Verde Ecologista de México, Partido del Trabajo, Partido Chiapas Unido, Partido Mover a Chiapas, Partido Encuentro Solidario, Partido Fuerza por México, Partido Redes Sociales Progresistas y Partido Democrático Chiapaneco, convirtiéndose en la coalición más grande construida en el estado de Chiapas.
Le sigue Olga Luz Espinosa Morales integrando a la Coalición “Fuerza y Corazón Por Chiapas“ conformada por el Partido Acción Nacional, Partido Revolucionario Institucional y el Partido de la Revolución Democrática.
Así también contiende en este 2024, Karla Irasema Muñoz Balanzar del Movimiento Ciudadano.
Obviamente, no solo las estadísticas le darían el triunfo contundente a Eduardo Ramírez con un nivel de aceptación más allá del 70% del padrón electoral que acudirá a votar, pero, estadísticamente, con una coalición que integra a la mayoría de todos los partidos políticos que tienen registro en Chiapas (a excepción solo de 4 partidos políticos) el triunfo es más que rotundo.
Eduardo Ramírez se convertirá entonces en el candidato a gobernador más votado de la historia de Chiapas. Su trayectoria política le ha valido. No solamente porque ha llevado una carrera política exitosa (al grado de ser el único chiapaneco presidente del Senado de la República) sino que,además de lograr triunfar como gobernador del estado, le posicionará como constructor de una nueva clase política.
Todas las encuestas le dan el triunfo en una escala incluso de más de dos terceras partes a su próxima oponente.
En las elecciones del 2018 el porcentaje de participación fue del 68.70% y estimando que en este 2024 la participación sea del 70%, con un padrón electoral en Chiapas de 4,004,774 ciudadanos para esta contienda, tendríamos un total de 2,803,341 de ciudadanos que acudirán a las urnas.
Si todas las encuestas arrojan que las preferencias electorales de Eduardo Ramírez son del 65%, entonces de esos ciudadanos que acuden a las urnas, le estarían dando el triunfo con un total de 1,825,421 votos.
¿Qué le quedará a Chiapas para los próximos años? Tener a un gobernador que ha decidido imprimir a su gobierno el sentido humanista, un gobierno incluyente, que logre unificar a todos los sectores de la entidad, a alguien que llega con un nivel de legitimidad muy alto y que ha sido identificado por sus conocimientos tanto de la administración pública, del ejercicio del gobierno, del liderazgo legislativo que demostró, además de la práctica del deporte y cultura y sobre todo, quien desea ser ese parteaguas para que se hable de un Chiapas antes y después de.
Los datos están, las estadísticas están, las encuestas nos dictan un escenario y si traducimos el porcentaje de preferencia por Eduardo Ramírez en esta elección, si tendremos al candidato a gobernador más votado de la historia, logrando más allá de un millón ochocientos mil votos.
Fuente: Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana.
* Académico Investigador en Ciencias Políticas y Administración Pública