Hacen llamado a la acción ante el aumento de menores institucionalizados en Chiapas y crear políticas para unaprotección más efectiva
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
La procuradora de protección de niños, niñas y adolescentes (NNA) y la Familia del Sistema DIF Chiapas, María Isabel Cruz Cruz, destacó la preocupante situación de 568 infancias y adolescencias que en la actualidad viven institucionalizados en el estado. Estos menores se encuentran bajo la asistencia del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en 28 albergues o casas hogares, ahora denominados centros de asistencia social.
La realidad de estos niños y adolescentes vulnerables conlleva una serie de desafíos y responsabilidades para las autoridades competentes. Cruz Cruz subrayó la importancia de brindarles un cuidado temporal residencial adecuado, que garantice así su bienestar físico, emocional y psicológico mientras se resuelve su situación jurídica o se trabaja en su reunificación familiar.
En este contexto, el sistema de cuidados alternativos emerge como una medida innovadora para mejorar la calidad de vida de estos menores en situación de vulnerabilidad. La implementación de estos programas busca ofrecerles un entorno armónico y seguro donde puedan desarrollarse de manera integral, promoviendo su bienestar y su inserción social.
Es fundamental que las autoridades y la sociedad en su conjunto se comprometan a proteger los derechos de estos niños y adolescentes, brindándoles el apoyo y la atención necesarios para garantizarles un futuro digno y prometedor. Además, se deben fortalecer las políticas públicas orientadas a prevenir la institucionalización de menores y fomentar la reunificación familiar siempre que sea posible.
En última instancia, el aumento en el número de niños y adolescentes institucionalizados en Chiapas plantea un llamado a la acción urgente por parte de las autoridades y la sociedad civil para abordar las causas subyacentes de esta problemática y trabajar en conjunto para garantizar el bienestar y la protección de los niños y adolescentes más vulnerables en la región.