Campesinos secuestraron a policías y trabajadores municipales en demanda de compromisos por seis millones de pesos
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
El incumplimiento de las promesas del presidente municipal de San Cristóbal de Las Casas, Mariano Díaz Ochoa, ha desencadenado una grave crisis en la ciudad. El secuestro de 40 personas este martes y atentados contra el penal número cinco por parte de ejidatarios de Los Llanos han puesto de manifiesto la tensión creciente entre la comunidad y el Gobierno municipal.
Los comuneros tomaron medidas drásticas al no recibir la malla ciclónica prometida por el alcalde, un compromiso que ascendía a seis millones de pesos y que debía cumplirse tras el proceso electoral de 2024. El hartazgo llevó a los campesinos a retener a policías estatales, municipales, agentes ministeriales y trabajadores de la dirección de limpia en un intento de presionar al Gobierno local para que cumpla con lo acordado.
El conflicto escaló cuando los ejidatarios, incendiaron el Centro de Readaptación Social número cinco y cortaron el suministro eléctrico del penal. Este acto resaltó la falta de respuesta efectiva por parte de las autoridades locales. No obstante, los manifestantes amenazaron de ingresar al penal si no se entregaba el apoyo, esto fractura más la relación entre Gobierno y ciudadanía.
Las 40 personas retenidas permanecen en la comunidad del Llano, y las negociaciones entre el Gobierno estatal y los comuneros continúan en un intento por resolver la situación. La falta de cumplimiento de promesas electorales por parte de Díaz Ochoa ha empeorado la mesa de diálogo.
La comunidad de Los Llanos ha demostrado que la falta de cumplimiento puede llevar a situaciones extremas. Además, la crisis pone en relieve la necesidad de que las autoridades municipales tomen en serio los compromisos asumidos con sus ciudadanos, en especial en comunidades rurales.
La situación en San Cristóbal de Las Casas no solo es un llamado de atención para Díaz Ochoa, sino también para otros líderes políticos sobre la importancia de mantener sus promesas y de trabajar de manera transparente y comprometida con las comunidades a las que sirven.
