Organizaciones advirtieron sobre una práctica que amenaza el bienestar y desarrollo de los niños
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
La reciente retención de seis menores indígenas tsotsiles en Navojoa, Sonora, ha desatado una ola de críticas y preocupación entre organizaciones civiles y defensoras de derechos humanos. Según la Red de Observación y Acompañamiento a Niñeces Indígenas en Situación de Movilidad (Roanim), la intervención del personal del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de las Familias (DIF) local se llevó a cabo bajo circunstancias engañosas, lo que ha generado serias inquietudes sobre el respeto a los derechos de las niñeces indígenas en situaciones de movilidad.
Los niños, que van de uno a 12 años de edad, fueron separados de su madre, en tres operaciones distintas. La excusa para la retención fue que serían trasladados para recibir atención básica, lo que, según testimonios, fue utilizado como una táctica para llevarse a los menores sin el consentimiento adecuado de sus familiares.
La indignación se intensificó al considerar que este caso no es un incidente aislado, sino parte de un patrón más amplio de criminalización de la movilidad indígena. La situación de los menores chiapanecos mostró el impacto de las políticas de migración y movilidad, que a menudo olvidan la dignidad y los derechos fundamentales de estas comunidades.
Las organizaciones de la sociedad civil han exigido la inmediata reincorporación de los niños a sus familias, así como una revisión exhaustiva de los protocolos que llevaron a su separación. La respuesta de las autoridades es fundamental para evitar que este tipo de situaciones se repitan y para restaurar la confianza de las comunidades en las instituciones que se supone deben proteger sus derechos.
Asimismo, este caso no solo pone de relieve la urgencia de restablecer los derechos de los menores, sino que también plantea una reflexión sobre el papel que juegan las instituciones en la protección de la infancia indígena. La lucha por los derechos de los niños y niñas tsotsiles es un compromiso que debe ser asumido de forma colectiva.