Mientras tanto, las familias damnificadas esperan con ansias la asistencia necesaria para reconstruir sus vidas
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
En un escenario de creciente adversidad, las comunidades de Chapayal, Esquipulas y Janeiro, ubicadas en el municipio de Simojovel, han quedado incomunicadas tras el colapso de dos puentes, única vía de acceso, a causa de las intensas lluvias que azotaron la región. Esta situación ha dejado a más de una docena de familias en una situación crítica, con sus hogares en riesgo y sin posibilidad de recibir asistencia inmediata.
El personal de Protección Civil Municipal, en una rápida respuesta, se trasladó a la lejana comunidad de Pueblo Nuevo Sitalá para evaluar la magnitud de los daños. Desde el amanecer del día sábado, los equipos de contingencia comenzaron a recibir reportes sobre el impacto de las lluvias, que no solo causaron el derrumbe de infraestructuras, sino que también amenazaron la seguridad de los residentes locales. Las autoridades actuaron con premura, reconociendo la urgencia de la situación.
Las lluvias torrenciales de la noche anterior no solo destruyeron puentes vitales, sino que también generaron condiciones de riesgo para las viviendas cercanas. Los equipos de rescate han trabajado de manera incansable para evacuar a las familias más vulnerables, trasladándolas a zonas seguras. Este esfuerzo, aunque esencial, destaca la falta de infraestructura resiliente en áreas que enfrentan fenómenos naturales extremos.
El colapso de estas vías de comunicación pone en evidencia la necesidad urgente de mejorar las condiciones de infraestructura en el municipio. Las autoridades ejidales, en colaboración con el ayuntamiento municipal, se encuentran en la búsqueda de soluciones viables que no solo reparen los daños actuales, sino que también prevengan futuros desastres. La planificación y construcción de puentes más robustos, así como sistemas de drenaje adecuados, son ahora más necesarios que nunca.
La situación en Simojovel sirve como un recordatorio de los desafíos que enfrentan las comunidades rurales ante la embestida del cambio climático. La falta de acceso a servicios básicos y la vulnerabilidad de sus infraestructuras son problemas que deben ser abordados con urgencia.