CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
La doctora Andrea Mena Álvarez es una de las mujeres más reconocidas en el rubro académico. En
la actualidad se desempeña como coordinadora general del Centro de Estudios para el desarrollo
municipal y políticas públicas (CEDES) de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH), donde ha
realizado diversas aportaciones educativas y de vinculación con instancias gubernamentales.
Desde su posición, ¿cómo impacta el liderazgo femenino en la dinámica y la cultura de los
equipos o entornos laborales? “En la mayoría un liderazgo femenino es más responsable con la
sociedad, genera identidades en su grupo de trabajo, promueve más la participación entre sus
miembros, genera nuevas oportunidades para ellos, se torna inclusivo y procura detonar otros
liderazgos femeninos”, explicó.
¿Ha experimentado situaciones donde se ha sentido desafiada por estereotipos de género o
barreras en su trayectoria profesional? y ¿cómo las ha superado? “Desde que tengo uso de razón
he vivido esos desafíos y los he superado con la seguridad del deber cumplido, siempre he
pensado que la educación es el pivote para cualquier situación de desarrollo.
A través de mi escenario como académica de nivel superior y posgrados, trato de incidir en el
currículum en sus diversas dimensiones, como lo son escuelas, foros, congresos, entre otros.
Verbigracia el reciente libro publicado por la Comisión de Derechos Humanos de nombre
“Ciudadanía y derechos humanos de las mujeres en Chiapas”, donde participo con un capítulo
referente al proyecto de sedes universitarias que se instalaron en el Centro de Justicia para las
Mujeres (CEJUM) Chiapas”, afirmó.
¿La mentoría ha sido una parte importante de tu desarrollo profesional?, ¿Cómo fomenta un
ambiente de apoyo y mentoría para las mujeres en su entorno laboral? “Los respaldo totalmente
en las decisiones, para con ellas y su familia, se les apoya en cualquier situación de desarrollo que
deseen emprender como doctorados, licenciaturas, cursos, negocios entre otros, siempre
contarán de diversas maneras con mi sororidad y total otredad. Comparto a la vez mi
conocimiento y apoyo solidario”, reconoció.
¿Cuáles cree que son los cambios culturales necesarios para impulsar una mayor inclusión de
género en el ámbito profesional y social? “Nadie debe imponer los cambios culturales, será la
misma comunidad que decida, sin embargo, podemos tener injerencia a través de la educación,
recordemos que existe una máxima que es la autodeterminación de los pueblos, a decidir sus
propias formas de Gobierno, perseguir su desarrollo económico, social y cultural, sin intromisiones
externas y de acuerdo con el principio de equidad, por lo que se debe respetar su proceso
histórico”, detalló.
¿Qué mensaje le gustaría dar a las futuras generaciones de mujeres? “Mujeres, no olviden nunca
que muchas ya lucharon por ustedes, por lo que, tienen la responsabilidad de hacerlo por las
generaciones futuras, sobre todo, por las que, aun teniendo el derecho, no se les dará la voz”,
concluyó.