Acusó a “Alito” de utilizar el dinero para cubrir “emergencias” propias de la Presidencia del partido
PORTAVOZ/AGENCIAS
El 11 de enero de 2024, un grupo de hombres y mujeres arribó de manera abrupta a las oficinas del Organismo Nacional de Mujeres Priistas (ONMPRI). Abrieron la puerta a la fuerza y comenzaron a revisar cajones y escritorios. A la dirigente de ese momento, la diputada Montserrat Arcos, la obligaron a quedar en ropa interior para revisar que no llevara con ella ningún material importante o comprometedor, aunque quien la revisó le dijo que no sabía ni qué buscaba.
La violencia de la acción obedece a una serie de actos que evidencian la manera en la que Alejandro Moreno Cárdenas, presidente Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y su círculo cercano, manejan las finanzas del partido; en este caso concreto, el dinero que constitucionalmente debe destinar al Liderazgo Político de las Mujeres.
A través de la contratación de talleres en línea, que en apariencia se compran para la capacitación de cuadros priistas, Moreno Cárdenas desplegó todo un sistema para poder quedarse con millones de pesos bajo el argumento de tener una “necesidad económica”.
En la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) están dos de los tres contratos en cuestión firmados en 2023. El primero, titulado “Empoderamiento de las mujeres desde lo individual hasta lo colectivo” y “La violencia política contra las mujeres en razón de género antes de campaña, en la campaña y después de la campaña, contexto y manifestaciones”. Cada uno de ellos, con modalidad en línea, costó 10 millones 875 mil pesos que fueron pagados a un único contratista: el Instituto de Investigación, Análisis y Formación Política, que tiene entre sus ponentes a figuras como Virgilio Andrade y Luis Carlos Ugalde.
El tercer contrato se llamó “Negociación y resolución de conflictos en el ámbito político de manera asertiva: ganar,ganar”, con un costo de 10 millones 657 mil pesos.
Y así, con esos tres talleres, el PRI ya cumplía con el ejercicio del 100 por ciento del total de presupuesto que debe demostrar que aplicó en Liderazgo Político de las Mujeres. La Ley General de Partidos Políticos establece que anualmente, los partidos deben destinar el tres por ciento de las prerrogativas con ese fin.
Sin embargo, el dinero no lo gastó el organismo priista de mujeres, a quien le corresponde ejercer ese presupuesto; para entonces el ONMPRI no había recibido ni un solo peso para realizar sus tareas.
Meses antes, en junio, llegó la primera petición que vino directamente de la dirigencia nacional para empezar con el negocio de los talleres que les permitiría quedarse con la mitad de lo que el partido reportará al Instituto Nacional Electoral (INE).
Dentro del PRI se sabe que no cumplir con un requerimiento de “Alito” se convierte en enojo, amenazas de que no haya cargos en el futuro, hostigamiento y aislamiento. Todo eso se concretó con Montserrat Arcos, quien se negó a prestarse para el montaje.
LA NECESIDAD DE ALITO
En 2023, a Montserrat Arcos no le entregaron presupuesto para las tareas del instituto de mujeres priistas. A mediados del año, Moreno Cárdenas le escribió a la diputada que le encargaría a Hugo Eduardo Gutiérrez Arroyo, secretario de Finanzas del CEN del PRI, explicarle “cómo está la cosa” para hacerse de parte del presupuesto de los talleres con una “propuesta responsable clara totalmente válida y legal”.
Dicha reunión se dio el 27 de junio:
—Tienes mal el dato, te vuelvo a repetir, vale. ¿Has hecho cursos en línea? —comenzó Gutiérrez Arroyo.
—Sí, sí he hecho cursos en línea —respondió Arcos.
—Ah bueno es lo mismo. Hacemos todos los cursos en línea y lo acabas con un putazo de cursos en línea, que a todo mundo le llegue en un clic ¿sí?, a todas las mujeres de todos los rincones.
—O sea, ¿esa es tu forma de sacarle el 50 por ciento?
—Todavía hay que comprobarlo.
—Ah, no pues. Es que como me dijiste ‘sabes que vamos a hacer este, menos eventos’, yo dije chale, pues vamos a hacer menos eventos y ¿quieres facturar más? O ¿qué pedo? O sea ¿cómo?
–O sea, chingo de cursos, pagas poco, no tienes que traer a nadie, no tienes que traer dirigentes, no tienes que pagar a nadie, no ni madres… lo metes a la chingada y te vas.
Hubo una segunda reunión, el 30 de junio en la que participaron Montserrat Arcos, el Secretario de Finanzas del PRI y Marco Antonio Gómez Alcántar, proveedor y fiscalista del PRI:
—Entonces este es un esquema, nada más para entender la lógica, de cómo cumplir con las dos partes. Con lo que nos encargaron a ti y a mí, y con lo que te toca a ti en tu responsabilidad como dirigente de las mujeres. Que tenemos que cubrir la parte política y también la parte fiscal que no nos vayan a chingar, o sea, son todos los tres frentes. Esto es al final la propuesta que te dije, escúchalo, convéncete, si no te convences, tomas la decisión que tú quieras —inició Gutiérrez Arroyo.
—Estos precios y esta estructura nos permite a nosotros que prácticamente el 50 por ciento. Entonces prácticamente se puede regresar o se puede obtener de regreso el 50 por ciento del total de los recursos. […] Esto es un tema extraordinario ¿no? Pero lo pusimos sobre la mesa para resolver la situación y la forma, es que si se paga el 50 por ciento, el [otro] 50 por ciento están de regreso en tres o cuatro días. […] Funciona —explicó Gómez Alcantar.
–O sea, ¿eso es ya quitando impuestos? —preguntó Arcos.
—No, ya trae también el IVA, porque aquí está el IVA nada más que el IVA, regresamos el ocho por ciento. O sea, del 16, queda el 16 como costo y sería el total más ocho por ciento.
—O sea, puesto en la mesa.
—Tú estás diciendo que por esto que es todo lo que yo tengo que manejar, tú con este servicio regresas ¿cuánto?
–El 50 por ciento.
—La mitad de 32. El 50 por ciento y el 50 por ciento libre.
—No entiendo esa parte.
—Tú tienes el costo más IVA, ¿no? El costo más el 16 por ciento, lo que cobran por hacerlo líquido es el ocho y te regresan el otro ocho, completito.
EL PROVEEDOR
Aunque desde que llegó al CEN del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas tuvo una fiebre por la contratación de cursos, para este año en que buscó quedarse con dinero público contrató a un único proveedor, que es el Instituto de Investigación, Análisis y Formación Política S. C.
SinEmbargo publicó desde 2022 el incremento en este tipo de contrataciones, debido a que de 2020 a 2023, el PRI pagó por 105 cursos, 180 millones 737 mil 769 pesos.
Pero fue hasta 2023 que los contratos, al menos en los tres cursos destinados a la “equidad de género”, fueron entregados al mismo proveedor.
De acuerdo con los audios los que SinEmbargo tuvo acceso, elegir al proveedor es crucial para el negocio debido a que garantiza el retorno del dinero a cambio de que se simulen los talleres.
Incluso el PRI generó las invitaciones a sus militantes a esos cursos en línea, esto también para demostrar al INE –que es quien audita el uso del recurso– que sí se ejerció el presupuesto destinado a mujeres.
El Instituto de Investigación, Análisis y Formación Política es un proveedor opaco que ha ganado millones de pesos con el PRI y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
No se sabe quién lo preside; en su página se comparte únicamente la lista de ponentes entre los que destacan Virgilio Andrade quien fue titular de la Secretaría de la Función Pública de Enrique Peña Nieto y quien concluyó que en el caso conocido como “la Casa Blanca” no había indicios de actos de corrupción.
También está en la lista el exconsejero presidente del entonces Instituto Federal Electoral (IFE, hoy INE), Luis Carlos Ugalde, quien además tiene otros negocios con el PRI a través de su empresa Integralia Consultores, que tiene como razón social Información y Tecnología para Asuntos Públicos S. C. El PRI le pagó en 2023, 840 mil pesos por “Servicios consistentes en consultoría de riesgo político”.
Los servicios de Ugalde corresponden a la elaboración de reportes sobre acontecimientos relevantes, monitoreo de comunicados y proyecciones de riesgos políticos.
El material derivado de todo eso se envió a correos electrónicos y cuentas de WhatsApp.
El Instituto de Investigación, Análisis y Formación Política fue registrado como proveedor por el Partido Verde en 2022. Ahí dicen tener como dirección Calle Sur 67 A, colonia Asturias en la Ciudad de México; una casa blanca que luce como cualquiera de las que la rodean.
Pero en su página web, el Instituto pone como dirección “avenida Paseo de la Reforma”, sin especificar el número. El teléfono disponible manda de manera directa a buzón.
En lo que respecta al Partido Verde, este le dio por un solo curso, un pago de 18 millones 536 mil pesos para sus militantes.
Tras denunciar formalmente los actos ocurridos dentro del PRI y que buscaron involucrarla, la diputada Montserrat Arcos ha sido víctima de una larga lista de intimidaciones de distinta magnitud, que va desde acoso en su hogar hasta el aislamiento dentro del partido.
El caso de malversación de recursos públicos está en manos del Instituto Nacional Electoral quien no tiene un plazo fijo para determinar culpables, además de que para problemas internos de los partidos se establece que son los partidos los que deben limar, primero, sus propias asperezas.
Arcos fue removida del ONMPRI y en su lugar quedó Xitlalic Ceja García, pareja de Lázaro Jiménez, uno de los hombres más cercanos de Alejandro Moreno Cárdenas y quien presidió el Instituto Jesús Reyes Heroles, otro núcleo de formación de priistas que también contrató cursos por millones de pesos.