La entidad enfrenta una creciente cifra de personas con esta condición y estimaciones que duplican los datos previos
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
La reciente reforma a la Ley para la Atención del Trastorno del Espectro Autista (TEA) en Chiapas marca un hito en el compromiso del estado con la población con autismo. La ley, aprobada por unanimidad en una sesión extraordinaria del Congreso local, representa un avance crucial hacia la inclusión y el respeto de los derechos humanos de las personas con discapacidad en la región. Sin embargo, el camino hacia la implementación efectiva de esta reforma enfrenta varios desafíos.
La integrante de la Asociación Civil TEA Chiapas, Mary Alfaro Aguilera, destacó que el último censo realizado en 2020 registró cinco mil niños con autismo en la entidad. No obstante, se estima que la cifra real podría llegar a los 20 mil debido a la expansión de los diagnósticos y a la falta de datos en comunidades rurales. Esta discrepancia subraya la necesidad de un censo actualizado que permita un enfoque más preciso y efectivo en la atención a esta población.
El nuevo marco legal aprobado establece un compromiso claro para que todas las dependencias estatales implementen acciones específicas en beneficio de personas con TEA. Entre ellos, se incluye el acceso garantizado a servicios en áreas clave como salud, educación y seguridad. Además, se creará un comité estatal interinstitucional que involucrará a la sociedad civil en la supervisión y mejora de la calidad de vida de los individuos con autismo.
La falta de un censo actualizado ha sido una barrera significativa en la formulación de políticas efectivas. La Asociación Civil TEA Chiapas, subrayó que las comunidades rurales han sido desatendidas. La necesidad de un censo actualizado no solo es crucial para la planificación de recursos, sino también para la identificación temprana y el apoyo a los individuos con autismo.
El estado se convierte en pionero en el sureste de México al adoptar una reforma integral, pero ahora enfrenta la tarea de garantizar que los servicios prometidos lleguen a todos los rincones del estado. La colaboración entre autoridades, organizaciones civiles y el sector privado será esencial para asegurar que la nueva legislación cumpla con sus objetivos y proporcione un impacto tangible en la vida de las personas con autismo en el estado.