De acuerdo con Ecosur, el fenómeno se acentúa en Chanal, Chalchihuitán, Mitontic, San Juan Cancuc, Huixtán y Tenejapa
YUSETT YÁÑEZ/PORTAVOZ
FOTO: JACOB GARCÍA
En el marco del Día Internacional de la Juventud, el Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), dio a conocer que la población chiapaneca que va en búsqueda del “sueño americano” ha modificado sus características sociodemográficas, “ha pasado de personas provenientes de actividades agrícolas, a perfiles ocupacionales urbanos, como la industria de la construcción, el comercio y los servicios”.
Por tanto, menciona que el poder migratorio materializado en remesas tiene un ingreso equivalente al 14 por ciento enProducto Interno Bruto (PIB) referente a estas transacciones económicas, acorde a lo indicado por el Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA).
Investigadores de Ecosur refieren tendencias persistentes, toda vez que la mayoría de quienes se desplazan son del sexo masculino. Esto como producto de lazos tradicionales de la mujer a la familia y la comunidad, y de los casi nulos eventos de reunificación familiar.
Según la Unidad de Política Migratoria del Gobierno de México, en su informe “Eventos de Devolución de Niñas, Niños y Adolescentes Mexicanos desde Estados Unidos”, dos mil 310 infantes chiapanecos fueron devueltos hasta el tercer cuatrimestre de 2023, distribuidos en mil 676 hombres y 634 mujeres; además de mil 375 en la condición de no acompañados, un 30 por ciento son indígenas.
En cuanto a formación escolar, las personas migrantes cuentan principalmente con estudios de primaria y secundaria. A pesar de los esfuerzos por implementar programas sociales, la migración persiste hacia Estados Unidos, Canadá y otras partes de México.
Ante esta situación, las autoridades de los municipios tsotsiles tiene una población de 14 mil 850 personas y que en su mayoría profesan la religión evangélica, buscan generar empleos a través de las obras municipales para evitar que la población emigre.
Quienes trabajan en los Estados Unidos, aseguran que les conviene trabajar en el vecino país, mientras que la gente de Los Altos, gana menos de 300, 350 al día, en tanto que,familiares que ya han migrado a Estados Unidos o Canadá, ganan en dólares y por hora, lo que los motiva a irse.
Los investigadores han registrado que los municipios de Chalchihuitán, Mitontic, San Juan Cancuc, Huixtán y Tenejapa, la migración de sus pobladores van en aumento, así como el endeudamiento de las familias, debido a que los llamados polleros o traficantes, les cobran entre 160 mil y 250 mil pesos para cruzar la frontera norte.