En un esfuerzo por mejorar el servicio, se busca implementar unidades ecológicas. Se discuten opciones de movilidad más eficientes
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
El presidente honorífico vitalicio del Movimiento Nacional del Transporte en General, Bersaín Miranda Borraz, destacó la reciente propuesta presentada a las autoridades estatales para renovar las unidades del transporte público mediante la incorporación de autobuses y vehículos eléctricos. Esta medida, según comentó, busca no solo actualizar la infraestructura del servicio, sino también mejorar la calidad de vida de los usuarios y reducir el impacto ambiental.
Miranda Borraz mencionó que ya se ha establecido un diálogo con la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMyT), quien ha mostrado apertura ante la iniciativa. El objetivo principal es mejorar el ordenamiento de las rutas del transporte urbano en Tuxtla Gutiérrez y evitar que los usuarios tengan que tomar hasta tres colectivos para llegar a su destino. “Queremos que los habitantes de Tuxtla Gutiérrez puedan llegar a sus destinos de forma más directa, cómoda y económica”, expresó.
Una de las preocupaciones que surgió durante las conversaciones es la necesidad de cumplir con las normativas del sector, tras la entrega de concesiones para la operación del transporte. Si bien los líderes del transporte están dispuestos a colaborar con las autoridades en la aplicación de operativos para regularizar las unidades, también hicieron un llamado a las autoridades para que cumplan con sus responsabilidades y aseguren el cumplimiento de la ley de manera equitativa.
En cuanto a la renovación de las unidades, el líder del sector transporte expresó que la intención no es solo contar con vehículos más modernos, sino también hacerlos más amigables con el medio ambiente. Se mencionó la posibilidad de introducir flotillas de autobuses eléctricos, los cuales podrían disminuir la emisión de contaminantes y contribuir a un entorno más saludable en la ciudad.
El proyecto de incorporar vehículos eléctricos en el transporte público de Tuxtla Gutiérrez no solo sería un avance en términos de tecnología y sostenibilidad, sino también un cambio positivo para la movilidad urbana. Con la disposición de los transportistas y la colaboración de las autoridades, se espera que en los próximos años esta idea se convierta en una realidad que beneficie tanto a los usuarios como al medio ambiente.
