Representa un artículo que forma parte de la indumentaria del tradicional parachico
YUSETT YÁÑEZ/PORTAVOZ
Saúl Nangusé es originario de Chiapa de Corzo, su trabajo lo comenzó por amor hacia sus tradiciones, cuenta que él desde muy pequeño salía de parachico, sin embargo, a veces no había recursos para comprar la indumentaria completa de este personaje, como es el caso de los chinchines, es por elloque tomó la iniciativa de ser un artesano de estas sonajas.
“Empecé porque no había tantos recursos para obtener parte de la indumentaria y entonces el chinchín de morro a mí me representaba una forma más accesible de obtener parte de la indumentaria y poder salir a danzar de parachico. Entonces ahí opto por el chinchín de morro”, señaló.
Poco a poco fue perfeccionando la elaboración, a tal grado de ahora realizar chinchines personalizados, ya sea colocando el nombre del propietario o plasmando la imagen de algún santo.
“Mayormente este año me han pedido imágenes religiosas,en esta ocasión San Sebastián, parachicos pocos, el niñito florero, más esos, más santitos. Sí fueron más santos, imágenes religiosas, en su mayoría San Sebastián que es a quien vamos a ver en los recorridos del mes de nuestra fiesta”, mencionó.
Los tiempos de elaboración de los chinchines dice, pueden variar dependiendo la complejidad de la imagen que se vaya a realizar en caso de que se requiera alguna imagen, en algunos casos de que no, que sea nada más el chinchín nada más limpio sin ninguna clase de imagen, tarda de dos a tres días, máximo cinco días.
Al cuestionarle sobre la cantidad de chinchines elaboró este año, mencionó que fueron alrededor de unos 40 más o menos. Algunos se fueron a diferentes lugares del país, como Ciudad de México, Guadalajara, Tijuana. Recalcó que en ocasiones hace piezas únicas que son para colecciones particulares.
Yo empecé elaborando chinchines para mi uso personal, después comencé con mis familiares, pintándoles a ellos y con base a eso fue que la gente conoció mis trabajos y ya me empezaron a pedir imágenes más específicas.
Hacer los chinchines es todo un arte, a cada morro (fruto) con el que se elaboran, se le da un tono en particular, que ya queda a elección del parachico, cuando está verde hay que rasparlo para que tenga un tono natural luego hay que quitarle la semilla, ya cuando está seco se le empieza a hacer el procedimiento de armar los chinchines, se le pone el manguito de madera y se le pone color. El costo de los chinchines puede variar, los hay desde lo mil pesos, hasta los dos mil pesos, todo depende del trabajo elaborado del artículo.
