Los accidentes en el crucero de Mazatán han dejado víctimas fatales, mientras la comunidad exige seguridad
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
Los constantes accidentes en el crucero de la carretera costera que conecta a Mazatán han generado preocupación entre automovilistas y peatones, quienes exigen la construcción urgente de un puente peatonal. La alta velocidad con la que circulan vehículos de carga y transporte público ha convertido este tramo en una zona de alto riesgo, donde cruzar la vía implica jugarse la vida. A pesar de los antecedentes trágicos, la falta de infraestructura adecuada mantiene en peligro a cientos de personas que utilizan este punto a diario.
Conductores particulares advirtieron que el problema no solo afecta a quienes cruzan a pie, sino también a quienes transitan en sus vehículos. La posibilidad de verse involucrados en un atropellamiento los deja en una situación vulnerable, con repercusiones legales y económicas.
La peligrosidad del crucero no es un fenómeno reciente, sino una situación que se ha agravado con el aumento del tránsito vehicular en la zona. Es un punto estratégico donde convergen automovilistas, transporte de carga y unidades de pasaje, lo que incrementa la dificultad para cruzar. Pese a ello, ninguna administración ha tomado medidas concretas para reducir los riesgos.
Quienes transitan a diario por este punto, muchos con destino a Huehuetán y Huixtla, señalaron que cruzar los cuatro carriles de la carretera es cada vez más peligroso. El flujo de peatones es constante, dado que muchas personas dependen de esta vía para trasladarse entre comunidades o acceder al transporte público. Sin embargo, la falta de infraestructura de seguridad ha resultado en múltiples atropellamientos, algunos con desenlaces fatales, lo que refuerza la urgencia de un puente peatonal que garantice un cruce seguro.
Más que una simple obra pública, el puente representa una medida de protección que podría salvar vidas. La comunidad de Mazatán ha esperado demasiado tiempo por una respuesta, mientras los accidentes continúan acumulándose. Sin intervención de las autoridades, la carretera reportará víctimas, lo que deja en evidencia la falta de atención a un problema que afecta a todos.