La reforma expone que se busca proteger la biodiversidad y la soberanía alimentaria
PORTAVOZ/AGENCIAS
El pleno de la Cámara de Senadores aprobó por 97 votos de Morena, PVEM, PT, PRI y MC, y 16 del PAN en contra la reforma a los artículos 4 y 27 de la Constitución, en materia de conservación y protección de los maíces nativos, cuyo decreto fue remitido a las Legislaturas de los estados y de la Ciudad de México para su aprobación; el cambio constitucional entrará en vigor solo si es aprobado por al menos 17 de los 32 Congresos locales.
La enmienda logra “un blindaje constitucional’’ para “impedir modificaciones transgénicas de los maíces nativos”, explicó en tribuna Óscar Cantón Zetina.
Al fundamentar el dictamen a nombre de la Comisión de Puntos Constitucionales, que preside, el tabasqueño afirmó que la reforma propuesta por la presidenta Claudia Sheinbaum nace de su “visión y el compromiso” de que “el maíz no es solo un cultivo; es la raíz de nuestra historia y la base de nuestra soberanía alimentaria”.
“Su iniciativa evitará que la especulación y la biotecnología sin regulaciones provoquen que el acceso a un alimento básico para millones de mexicanos, como es el maíz, dependa de monopolios extranjeros. No podemos estar comprando afuera, a multimillonarios costos, lo que bien sabemos producir en este país”, aseguró.
Detalló que la reforma favorece “la soberanía alimentaria porque defiende el derecho de las futuras generaciones a consumir maíz natural, libre de alteraciones genéticas’’ y blinda jurídicamente el campo mexicano “evitando que otros intereses a nuestra nación, muy ajenos, dicten esas reglas de producción y distribución de este recurso estratégico”.
La modificación del 27 constitucional, agregó, refuerza y reitera la obligación del Estado de fomentar la autosuficiencia alimentaria y prohibir expresamente el cultivo de maíz genéticamente modificado, garantizando la seguridad agroalimentaria de la nación.
PROHIBICIÓN
Al fijar la posición del grupo parlamentario del PAN, Miguel Márquez defendió “el maíz híbrido y criollo; yo no vengo a defender al maíz transgénico, vengo a hablar a favor del maíz híbrido”.
“¿Por qué? Porque hace más competitivo al campo mexicano. El maíz mexicano mejorado por hibridación tiene mayor competitividad, los rendimientos por hectárea son cada día mayores, de ocho, 10, 12, 14, hasta 18 hectáreas dependiendo del uso del suelo y el manejo del mismo”.
Del consumo nacional de 47 millones de toneladas de maíz al año, detalló, 55 por ciento es producción nacional, maíz blanco en concreto para la industria de la masa y la tortilla, pero el 45 por ciento restante es maíz amarillo del que se importa 90 por ciento, sobre todo de Estados Unidos, Brasil y Argentina.
“¿Y qué creen? Ese maíz es esencialmente transgénico y sí es para el sector pecuario, pero al final del día se está traduciendo en una total incongruencia. Estamos comprando maíz transgénico, y ahí lo vemos también en los cereales, lo vemos en las frituras, lo vemos en la fructosa, lo vemos también en los aceites, etcétera. ¡Qué incongruencia! Cada día, partiendo de más el maíz a nuestro país”, expresó.
Al final, condicionó el voto del PAN a favor de la enmienda si se incluía el maíz criollo e híbrido; “nada les cuesta, la arrogancia hacerla a un lado y la soberbia misma, entender que poner en el texto constitucional el maíz criollo e híbrido daría certeza a nuestros campesinos mexicanos para seguir tratando de ser más competitivos (…) Si se integra este texto, si se integra esta propuesta al texto constitucional, no lo duden, estaríamos votando a favor. De otra manera, no lo haremos”.