La Unicach pausó el ingreso de nuevos estudiantes hasta que se regularicen trámites
estatales y federales
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
La operatividad del Bachillerato de Innovación, Ciencias, Artes y Humanidades de Chiapas
(ICAHCH) no ha sido cancelada, sino puesta en pausa debido a deficiencias en su proceso
de creación. La falta de registro en el Sistema Nacional de Bachilleratos y la ausencia de
recursos etiquetados son dos de los principales factores que llevaron a la Universidad de
Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH) a tomar esta determinación. Sin embargo, los
estudiantes que se encuentran inscritos continuarán con su formación sin modificaciones.
El problema de fondo radica en que este subsistema educativo nació sin una base
financiera establecida, dependiendo de los ingresos por servicios de la UNICACH para su
mantenimiento. Este modelo ha generado un conflicto, dado que dichos recursos están
destinados a fortalecer las unidades académicas existentes. La falta de un presupuesto
propio ha impedido garantizar la expansión del bachillerato y ha limitado su operatividad
en el mediano plazo.
Además de los aspectos financieros, la infraestructura representa otro obstáculo. Sin
suficientes salones ni espacios adecuados, la posibilidad de admitir nuevos estudiantes sin
antes solucionar estos problemas resultaría insostenible. Según la directora del
bachillerato, Deyanira Escobar Ruiz, aún no se habían completado los trámites necesarios
a nivel estatal y federal, lo que dejó en el aire la certeza jurídica del programa.
La universidad ha señalado que la suspensión de inscripciones es una medida temporal
mientras se regularizan todos los procesos administrativos. Sin una fecha clara para su
reactivación, el futuro del bachillerato dependerá de la agilidad de la burocracia para
otorgarle la validez necesaria y garantizar su viabilidad económica.
A pesar de la incertidumbre, la continuidad del modelo educativo y la validez de los
certificados para los alumnos inscritos están aseguradas. No obstante, la experiencia deja
en evidencia la necesidad de mayor planificación y financiamiento en la creación de
nuevos subsistemas educativos para evitar que futuras generaciones enfrenten
situaciones similares.