Los conciertos masivos tienen el poder de dinamizar el turismo y pequeños comercios locales
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
Tuxtla Gutiérrez tiene en sus manos una oportunidad invaluable: transformarse en un referente nacional en turismo musical. Con su infraestructura, espacios adecuados y una oferta creciente de conciertos masivos, la capital chiapaneca podría no solo atraer a miles de turistas, sino también impulsar su economía de manera significativa. Este tipo de eventos no solo revitaliza el sector cultural, sino que generaría un efecto dominó que impacta a pequeños comercios, restaurantes y servicios de transporte.
El sector turístico en Tuxtla se beneficiaría con la consolidación de conciertos y festivales musicales de alto calibre. Según el coordinador de la Mesa de Seguridad Turística, Sismondi Esparza Flores, ciudades como Guadalajara y Monterrey han logrado posicionarse gracias a su apuesta por eventos internacionales, algo que Tuxtla podría replicar con la calidad y diversidad de sus propuestas. Esta estrategia no solo atraerá a turistas de otras ciudades del país, sino también a visitantes internacionales interesados en la cultura musical de Chiapas.
En la actualidad, Tuxtla cuenta con varios recintos ideales para conciertos y eventos masivos. Entre ellos se destacan el Foro Chiapas, el Centro de Convenciones Chiapas, el Estadio Víctor Manuel Reyna y el Polyforum, este último recién reacondicionado para albergar todo tipo de actividades. La reactivación de estos espacios es una muestra del interés local por posicionar la ciudad como un destino para grandes producciones musicales y culturales.
Lo interesante de esta propuesta es que no se limita a un solo género musical, sino que incluye eventos para todos los gustos y edades. Desde conciertos de música popular hasta presentaciones para los más pequeños del hogar, Tuxtla ha demostrado que tiene capacidad para adaptarse a una amplia variedad de públicos. Esto diversifica las opciones y atrae a un espectro más amplio de turistas.
El éxito de este tipo de iniciativas dependerá de una colaboración efectiva entre Gobierno, empresarios y la sociedad civil. Si se suman esfuerzos y se implementan estrategias para la promoción y organización de eventos de calidad, Tuxtla no solo se consolidará como un punto de referencia en turismo musical, sino que podría convertirse en un motor económico para todo el estado de Chiapas, al demostrar que la música tiene el poder de transformar ciudades.