El correcto uso de los recursos públicos será elemental para revertir daño económico
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
Ante la salida del presidente con licencia, Gilberto Rodríguez de los Santos, en Ocosingo se
experimentan fuertes problemas económicos que comprometen la estabilidad social del
municipio.
Se ha reportado que la maquinaria pesada del ayuntamiento se encuentra en estancamiento y se
pronostica que las carencias financieras podrían extenderse al sector vial y de protección civil.
La complejidad de la situación se intensifica con la decisión de Rodríguez de los Santos de buscar
nuevamente la reelección, colocando al municipio en una posición precaria, sin los recursos
necesarios para enfrentar gastos básicos.
La crisis financiera resultante ha dejado inmovilizada la maquinaria municipal, esencial para
diversas funciones, desde la respuesta a emergencias hasta la prestación de servicios
fundamentales para la comunidad, además, este paro afecta directamente la comunicación con
otras comunidades en la región.
Los pobladores se encuentran preocupados por la falta de respuesta y recursos para abordar este
desafío, mientras tanto, sentimiento de incertidumbre crece en la comunidad. La administración
actual se enfrenta a obstáculos para satisfacer las necesidades más apremiantes, y la maquinaria
varada simboliza las complicaciones financieras que afectan a la demarcación territorial.
La dificultad adicional radica en la dificultad de movilizar recursos y abordar de manera efectiva
esta situación. La comunidad exige respuestas concretas y soluciones inmediatas para superar este
bache crítico, sin permitir que las necesidades urgentes se queden en segundo plano.
La ciudadanía ha depositado su confianza en la nueva administración para gestionar de manera
eficiente el presupuesto municipal y revitalizar la maquinaria, restableciendo los servicios
esenciales y la confianza del pueblo. La respuesta efectiva a esta crisis financiera será clave para
garantizar la seguridad y el bienestar de todos los habitantes de Ocosingo.