La falta de inversión en reproducción y el impacto del fuego agravan la crisis en el sector
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
Los incendios que han arrasado con al menos 50 hectáreas de pastizales en Arriaga han provocado
una crisis en la producción lechera. Ganaderos de la región advirtieron que la pérdida de alimento
para el ganado ha reducido de manera drástica la cantidad de leche obtenida, lo que afecta sus
ingresos y eleva los costos del producto en el mercado.
La escasez de zacate seco ya representaba un problema para el sector, pero ahora, con la
destrucción de los pastizales, la producción ha caído a niveles alarmantes. Productores que antes
obtenían hasta 300 litros de leche al día, ahora apenas alcanzan los 40, poniendo en riesgo la
viabilidad del negocio.
A nivel nacional, el precio del litro de leche ha alcanzado los 11.50 pesos con estímulos
gubernamentales, un incremento considerado histórico. Sin embargo, en Chiapas, la baja
producción genera incertidumbre sobre la estabilidad del mercado. Ganaderos advirtieron que, sin
una inversión real en reproducción y manejo eficiente del ganado, los beneficios de este ajuste de
precios podrían no llegar al productor.
El problema no solo es el estiaje, sino la falta de estrategias preventivas. Chiapas tiene una de las
tasas más bajas de reproducción de becerros en el país, puesto que alcanza apenas un 30 por
ciento. Expertos señalaron que la falta de inversión en genética y alimentación del ganado ha
limitado el crecimiento del sector, lo que agrava los efectos de los incendios y la crisis forrajera.
Ante este panorama, los ganaderos urgen apoyo para mitigar los efectos del fuego y evitar que la
escasez de leche afecte a consumidores y productores. La combinación de incendios, baja
reproducción y falta de incentivos amenaza con encarecer aún más el producto, al generar un
impacto directo en la economía de la región. Sin medidas urgentes, la producción podría
desplomarse aún más en los próximos meses.