La exención del IVA e ISR potenciará la economía y fortalecerá el desarrollo industrial en la región fronteriza
IVÁN LÓPEZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
Chiapas relegada de los grandes proyectos de desarrollo, se perfila como una nueva zona de interés para la inversión privada. La implementación de una política de tasa cero en impuestos federales y estatales para el polo industrial de Puerto Chiapas ha despertado expectativas en el sector empresarial, que proyecta un impulso significativo a la economía regional, en especial en Tapachula.
Con la exención del ocho por ciento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y el 20 por ciento del Impuesto Sobre la Renta (ISR) para nuevas empresas, la apuesta es clara, atraer capitales nacionales e internacionales que detonen empleo e infraestructura. La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en Tapachula estimó la creación de al menos cinco mil empleos directos en el primer año de aplicación, una cifra relevante en una zona marcada por el desempleo y la migración forzada.
Además de los beneficios fiscales, se anunció la simplificación de trámites como el uso de suelo y la apertura de empresas. Esto no solo haría más accesible la instalación de nuevas industrias, sino que también podría incentivar la formalización de negocios ya existentes, siempre que las reglas de operación, aún pendientes de publicación, permitan una participación real de las empresas locales.
No obstante, expertos fiscales advirtieron que el éxito de esta medida dependerá de su aplicación efectiva y transparente. Si las reglas son claras y los beneficios llegan a quienesproducen en la región, la tasa cero podría convertirse en un precedente para modelos de desarrollo sostenibles en otras zonas marginadas del país.
Por ahora, Tapachula observa con atención. El anuncio del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar es un paso importante, pero el verdadero reto será convertir la política fiscal en empleo digno, cadenas productivas fuertes y arraigo local. En una frontera que ha sido zona de paso y olvido, la tasa cero representa una oportunidad que no puede desperdiciarse.