Dr. Gilberto de los Santos Cruz
En este día se celebra para conocer la función que desempeñan los derechos
de propiedad intelectual (patentes, marcas, diseños industriales, y derechos
de autor) en el fomento a la innovación y la creatividad. Se reconoce y
celebra el talento, ingenio, curiosidad y valor de las mujeres que impulsan
cambios en el mundo.
Las mujeres generan a diario invenciones revolucionarias y creaciones que
mejoran y transforman la vida de las personas; además, fomentan la
capacidad de comprensión del ser humano en ámbitos que van de la
astrofísica a la nanotecnología, la medicina, la inteligencia artificial y la
robótica. En lo creativo, ya sea el cine, animación, música, moda, diseño,
escultura, danza, literatura, arte y otros ámbitos, están reinterpretando la
cultura y poniendo a prueba los límites de la expresión artística y creativa.
Hoy son más las mujeres que asumen funciones de liderazgo y hacen oír sus
voces en la ciencia, la tecnología, los negocios y las artes. Trabajando al
unísono, mujeres y hombres fortalecen sus capacidades; mejoran su facultad
de enriquecer el acervo cultural común; y contribuyen a hallar soluciones
eficaces para mitigar la pobreza, fomentar la salud mundial y salvaguardar el
medio ambiente.
A nivel mundial, algunas de las principales mujeres inventoras y científicas y
sus respectivos inventos, han sido: Barbara Askins y el mejoramiento del
revelado de fotografía; Katharine Burr Blodgett y el vidrio anti reflejante;
Marie Curie y la teoría de la radiactividad; Rosalind Franklin y la doble hélice
del ADN; Katherine Johnson y los cálculos del Apolo 11; Maria Telkes y la
calefacción solar residencial; Shirley Jackson y el impulso en
telecomunicaciones; Hedy Lamarr y el espectro disperso; Ada Lovelace y el
algoritmo; Grace Murray Hopper y el lenguaje de programación COBOL
(Common Business-Oriented Language); Mary Anderson y los parabrisas;
Josephine Cochrane y el lavaplatos; Bette Nesmith Graham y el corrector.
Este día representa una oportunidad para poner de relieve la manera en que
el sistema de propiedad intelectual (PI) puede apoyar a las mujeres
innovadoras y creativas, y a todas las personas en su empeño por llevar sus
ideas a distintas industrias.
Los estados miembros de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual
(OMPI), en 1970 eligieron el 26 de abril día en el que entró en vigor, el
Convenio de la OMPI para celebrar el Día Mundial de la Propiedad
Intelectual, la conmemoración de este día tiene como objetivo atraer el
interés del público por cuestiones relacionadas con la propiedad intelectual.
El término propiedad intelectual se refiere a la protección del producto del
intelecto humano, sea en los campos científicos, literarios, artísticos o
industriales. La campaña también da la oportunidad de destacar el papel que
desempeñan los derechos de PI, como patentes, marcas, diseños industriales,
derecho de autor, para estimular la innovación y la creatividad. El tema de
2024 es “La PI y los ODS: Nuestro futuro común se forja con innovación y
creatividad”.
El Día Mundial de la Propiedad Intelectual brinda una oportunidad única para
considerar, junto a otras personas de todo el mundo, de qué manera la
propiedad intelectual ayuda al panorama mundial de las artes a prosperar, y
propicia a la innovación tecnológica que da impulso al progreso humano. El
Día Mundial de la Propiedad Intelectual hace hincapié en la importancia de
un sistema equilibrado de propiedad intelectual para reconocer y
recompensar a los inventores y creadores por su trabajo y garantizar que la
sociedad se beneficie de su creatividad e ingenio. Los derechos de PI
permiten a investigadores, inventores, empresas, diseñadores, artistas y
otras personas proteger por derecho sus productos innovadores y creativos y
obtener de ellos un rendimiento económico.
El Día Mundial de la Propiedad Intelectual 2024 constituye una oportunidad
para explorar cómo la PI fomenta las soluciones innovadoras y creativas que
necesitamos para forjar nuestro futuro común y puede amplificar sus
repercusiones.
Para forjar nuestro futuro común y alcanzar los Objetivos de Desarrollo
Sostenible (ODS), necesitamos repensar la forma en que vivimos, trabajamos
y nos entretenemos.