Buscan ser un refugio para la comunidad. Con el apoyo de Chuvajetik y La Enredadera, ofrecerán herramientas de desarrollo personal
CARLOS RUIZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
El próximo 26 de abril, la ciudad de San Cristóbal de Las Casas dará un paso significativo hacia la inclusión y el respeto a los derechos humanos, con la inauguración de una escuela dirigida a la población LGBT. Este proyecto es una iniciativa conjunta entre la colectiva Chuvajetik y el espacio cultural La Enredadera, con el propósito de ofrecer un espacio seguro y accesible para que las personas de la comunidad LGBT puedan fortalecer sus habilidades socioemocionales y recibir orientación sobre sus derechos.
El portavoz de Chuvajetik, Óscar Bautista Ruiz, subrayó la importancia de generar una plataforma educativa que sirva como refugio para quienes han enfrentado exclusión y discriminación. “Queremos que este espacio sea un punto de encuentro y formación para quienes han enfrentado discriminación y exclusión”, afirmó Bautista, el cual destacaría que la escuela no solo impartirá conocimientos legales, sino también herramientas prácticas para el empoderamiento personal y social de sus participantes.
La escuela, que abrirá sus puertas en el Centro Comunitario Fortaleza de la Mujer Maya (FOMMA), ofrecerá una serie de talleres y actividades orientadas a fortalecer la autoestima, el liderazgo y la integración comunitaria. Estos esfuerzos no solo buscan visibilizar los derechos de la comunidad LGBT, sino también fomentar un ambiente de respeto y solidaridad entre los miembros de esta población, promoviendo su plena participación en la sociedad.
Con esta nueva propuesta, Chuvajetik y La Enredadera se comprometen a trabajar por la defensa de los derechos de la diversidad sexual en Chiapas, donde las luchas por la igualdad siguen siendo una prioridad. A través de la educación y el acompañamiento emocional, se busca crear un entorno más inclusivo, libre de prejuicios y con mayores oportunidades para el crecimiento personal y colectivo.
Este proyecto también responde a una necesidad urgente de espacios educativos inclusivos, donde las personas LGBT puedan encontrar apoyo y aprender sobre sus derechos sin miedo a ser juzgadas. Además, esta escuela no solo será un refugio, sino un lugar donde se fomenten valores como la solidaridad, el respeto y la igualdad, valores esenciales para una sociedad más justa.