Más de mil 500 niños de diversos municipios acuden a terapias especiales
YUSETT YÁÑEZ/PORTAVOZ
FOTO: ALEJANDRO LÓPEZ
En el contexto de la atención de la salud infantil en Chiapas, el centro de rehabilitación
ubicado al oriente de Tuxtla Gutiérrez se ha convertido en un pilar fundamental para el
bienestar de más de mil 500 niños y niñas que presentan diversos padecimientos. Este
centro no solo atiende a pacientes locales, sino que también recibe a niños de diferentes
municipios de Chiapas y de Guatemala, reflejando la importancia de su función en la
región.
La atención médica en el centro se caracteriza por un enfoque integral que abarca no solo
la atención médica, sino también la rehabilitación, el apoyo psicológico y la educación en
salud. Este modelo multidisciplinario es esencial, dado que muchos de los niños que llegan
al centro enfrentan condiciones complejas que requieren un abordaje coordinado entre
diferentes especialidades.
El centro de rehabilitación ubicado al oriente de la ciudad opera bajo un modelo de cuotas
de recuperación accesibles, adaptadas a las posibilidades económicas de cada familia. Por
ejemplo, en algunos centros, las familias pueden pagar hasta 20 pesos por consulta o
sesión de rehabilitación, en contraste con los costos significativamente más altos en
clínicas privadas.
A nivel nacional, se estima que el costo anual de atención por paciente es de
aproximadamente 43 mil pesos para discapacidades físicas y hasta 200 mil pesos para
casos de autismo, aunque estos montos suelen estar subsidiados.
La atención oportuna y adecuada puede marcar una diferencia significativa en la calidad
de vida de estos niños, permitiéndoles tener un desarrollo más pleno y saludable.
El equipo médico del centro está compuesto por pediatras, nutricionistas, psicólogos,
terapeutas ocupacionales y especialistas en rehabilitación, quienes trabajan en conjunto
para ofrecer un tratamiento individualizado. Este enfoque permite identificar las
necesidades específicas de cada niño, garantizando que reciban la atención adecuada
desde el primer contacto con el sistema de salud.
Además de la atención médica, el centro también realiza campañas de sensibilización y
educación para padres y cuidadores, promoviendo prácticas de salud que contribuyan al
bienestar infantil. Estas iniciativas buscan empoderar a las familias con información sobre
prevención y manejo de enfermedades, así como fomentar estilos de vida saludables.
La colaboración con instituciones educativas y organizaciones no gubernamentales es otro
aspecto fundamental en la labor del centro. A través de programas conjuntos, se busca
facilitar el acceso a tratamientos y recursos para los niños que requieren atención
continua. Esta red de apoyo es vital para asegurar que los niños no solo reciban atención
médica, sino que también tengan acceso a oportunidades educativas y recreativas.
El impacto del Centro de Especialidades en la comunidad es significativo, no solo por la
atención que brinda, sino también por su papel en la reducción de la carga de
enfermedades en la población infantil. Al ofrecer un espacio donde se prioriza la salud y el
bienestar de los niños, se está contribuyendo a la construcción de un futuro más saludable
para las próximas generaciones.
A pesar de los logros alcanzados, el centro enfrenta desafíos importantes, como la
necesidad de recursos adicionales y la capacitación continua del personal. La demanda de
servicios sigue en aumento, y es fundamental que se mantenga el compromiso de las
autoridades y la comunidad para garantizar que todos los niños, independientemente de
su lugar de origen, tengan acceso a la atención que necesitan.