Han tomado alternativas ante futuras descargas electrónicas para evitar pérdidas económicas
YUSETT YÁÑEZ/PORTAVOZ
En los últimos días, Tuxtla Gutiérrez ha enfrentado una serie de apagones que han afectado tanto a los hogares como a los comercios de la ciudad. La situación ha generado una creciente preocupación entre ciudadanos y empresarios, quienes ven cómo estos cortes de energía impactan directamente en su calidad de vida y en sus operaciones comerciales.
Los apagones en la capital chiapaneca han sido atribuibles principalmente a la alta demanda de energía eléctrica, exacerbada por las altas temperaturas que se han registrado en la región. Esta demanda, que afecta tanto a los hogares como a los negocios, ha puesto a prueba la capacidad del sistema eléctrico local. Miguel Ángel Blass, presidente de la Cámara de Comercio, ha expresado su preocupación por la situación, señalando que “definitivamente los apagones nos afectan a todos”.
La interrupción del suministro eléctrico ha tenido consecuencias significativas en el sector empresarial. Muchos comercios dependen de la electricidad para operar, ya sea para mantener en funcionamiento sus equipos, refrigerar productos o atender a sus clientes. Los cortes repentinos de energía pueden provocar pérdidas económicas considerables, especialmente en establecimientos que manejan productos perecederos. Afortunadamente, algunos comercios han logrado adaptarse a la situación, pero el temor a que los apagones se prolonguen sigue latente.
Para hacer frente a esta problemática, la llegada de un nuevo transformador ha sido anunciada como una solución a corto plazo. Este transformador, que se instalará en la zona sur de la ciudad, tiene como objetivo disminuir la frecuencia de los apagones y mejorar la estabilidad del suministro eléctrico. Blass ha manifestado que esta noticia trae consigo un respiro, dado que “realmente eso nos da una tranquilidad en el corto plazo”.
Sin embargo, la situación sigue siendo precaria y los comerciantes continúan preocupados por posibles desabastecimientos. Aunque hasta ahora no se han reportado pérdidas significativas por productos descompuestos, el riesgo persiste. Muchos empresarios han tomado medidas preventivas, como el uso de generadores eléctricos y sistemas de respaldo, para mitigar el impacto de los cortes de energía.
La comunidad empresarial de Tuxtla Gutiérrez está a la espera de que las autoridades implementen soluciones duraderas para evitar que los apagones se conviertan en una constante. La colaboración entre la Cámara de Comercio y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) será crucial para garantizar un suministro eléctrico confiable y suficiente.
Por último, es fundamental que los ciudadanos permanezcan informados sobre la situación y continúen reportando cualquier anomalía en el suministro eléctrico. La resiliencia de la comunidad y la capacidad de adaptación de los comercios son aspectos clave para enfrentar los desafíos que presentan los apagones en Tuxtla Gutiérrez.
Este problema representa un desafío significativo tanto para los ciudadanos como para el sector comercial. Con medidas adecuadas y la colaboración de las autoridades, se espera que la situación mejore en el futuro cercano, permitiendo que la vida cotidiana y las actividades económicas retornen a la normalidad.